¿Por qué los inmigrantes mexicanos están enviando más remesas que nunca antes?
Conoce los motivos del porque las transferencias de efectivo a México se mantienen fuertes
En plena crisis económica, cuando el empleo en Estados Unidos está en niveles deprimentes, los inmigrantes mexicanos no abandonan a sus familias y continuan enviando remesas millonarias que incluso son por encima de lo acostumbrado.
Aunque analistas del banco BBVA estimaron que las remesas de migrantes a México podrían caer hasta un 21% debido a los pedidos de quedarse en casa y el desempleo récord en la unión americana, recientemente el Banco de México ha reportado que recibió $4.02 mil millones en marzo de 2020, aumentando un 35.8% con respecto a marzo del año pasado.
¿Cómo es esto posible en tiempos de recesión? Frente a una economía “cerrada”, hay ciertos sectores que siguen haciendo los mexicanos… los trabajos más duros y con gran riesgo de contagio.
Según datos del censo de Estados Unidos, los inmigrantes mexicanos tienen más probabilidades que otros trabajadores de trabajar en las industrias de construcción, mantenimiento, servicios y producción. Todos estos son sectores “esenciales” de la economía pandémica, aunque muchos pagan apenas por encima del salario mínimo.
Y también esta situación ha expuesto de forma desproporcionada a la población latina al coronavirus. Del 34% de las muertes de Covid-19 en Nueva York, los latinos representan el 27% de la población de la ciudad.
El aumento de las remesas también se debe, en parte, a una fuerte caída en el valor del peso mexicano, según un informe reciente del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos, o CEMLA.
A principios de marzo, el poder adquisitivo de $1 aumentó de $19.42 a $25.35 pesos mexicanos, un aumento del 30.5% en solo tres semanas. Eso significa que cada dólar estadounidense enviado a México vale más allá. Durante ese mismo tiempo, según el informe de CEMLA, la transferencia de remesas promedio de los migrantes mexicanos en Estados Unidos aumentó de $ 315 a $ 343.
Hay razones para pensar que las transferencias de efectivo a México se mantendrán fuertes. Los sentimientos de obligación familiar no cambiarán debido a la pandemia, y el tipo de cambio entre el dólar estadounidense y el peso mexicano sigue siendo favorable para los remitentes de remesas. Estos factores deberían mantener los fondos fluyendo hacia el sur.