5 consejos para ahorrar energía durante la pandemia
El confinamiento no tiene que ser la causa de que los gastos en el hogar se incrementen
El 2020 pasará a la historia no solo como un año de dolor y penurias ante la irrupción de la pandemia por COVID-19, también como un momento en el que muchos de nuestros hábitos se han visto trastocados para dar paso a nuevas realidades con un impacto directo en nuestra vida diaria.
Quizá el cambio más significativo de todos ha sido el que se refiere al confinamiento, autoaislarse para mantener al coronavirus fuera de nuestro espacio vital con todas las adecuaciones e inconvenientes que eso implica, entre ellas, el riesgo de incrementar el costo de los servicios básicos por estar casi de tiempo completo en el encierro, los cuales están más expuestos a incrementarse; sin embargo, esto no necesariamente tiene que ser así, por eso te dejamos 5 prácticos consejos para que el encierro no impacte tu factura.
1. Con velas para cenar
Cuando la luz natural se va y llega la hora de cenar, se suelen tener prendidas más bombillas de las que en verdad hacen falta, por lo que una alternativa romántica si se trata de compartir ese momento del día con la pareja, o divertida si es la hora de compartir los alimentos con la familia, es sustituir la luz eléctrica con velas distribuidas en la mesa. Además de hacer de la cena una experiencia diferente, a final de mes se verá reflejado cuando llegue la cuenta para pagar.
2. Entre más frío, más caro
El verano está justo en su punto más caluroso de la temporada y pasar la mayor parte del día en casa requiere el uso casi obligado del aire acondicionado por mucho más tiempo, pero en ocasiones nos excedemos con el frío, es importante recordar que la temperatura de confort se sitúa entre los 72 y los 77ºF (22-25ºC), así que tan solo colocarlo en el punto más alto de este rango representa un buen ahorro si tomamos en cuenta que cada dos grados Fahrenheit, representan alrededor de un 8% adicional en su consumo energético.
3. Fugas, filtros, persianas y cortinas
Mantener un entorno aislado puede significar un ahorro superior al 20% en el consumo del aire acondicionado, ya que entre menos entradas de aire existan tanto en puertas y ventanas (las cuales se pueden repararse con burletes), el funcionamiento se optimizará. Asimismo, utilizar las persianas o cortinas para regular la temperatura de la casa tapando la entrada directa de los rayos del sol, mientras que en cuanto al mantenimiento del aire acondicionado se refiere, es necesario limpiar los filtros al menos una vez al año.
4. Uso de ventilador
Aun en tiempos en los que el calor apremia, no debiera ser necesario tener prendido el aire acondicionado todo el día, por lo que si no se cuenta con uno, adquirirlo representa una buena inversión, ya que un uso de batalla de 12 horas al día representa menos de 10 dólares al mes en la factura de la luz, comparado con los cientos a los que se pueden llegar con el aire acondicionado. El ventilador puede ser un buen relevo durante la noche, cuando las temperaturas son más bajas.
5. Cargas completas
Los tiempos de extremar medidas pueden servir para adquirir nuevos hábitos de consumo que además de que nos permitan ahorrar, representen un menor impacto ambiental. Uno de ellos es optimizar el uso de la lavadora, secadora y lavavajillas al echarlas a andar cuando se tenga la carga completa, con lo que se aprovechará al máximo su desempeño. Asimismo, evitar lavar la ropa con agua caliente al menos que sea de verdad necesario, lo cual incluso ayuda a retrasar la decoloración de las prendas.