7 mitos de las tarjetas de crédito que te pueden costar mucho dinero
Aunque las tarjetas de crédito sean una de las formas más convenientes de pagar, existen muchos mitos a su alrededor que te pueden costar caro
Las tarjetas de crédito son herramientas financieras muy buenas, ya que brindan comodidad, seguridad y una gran variedad de beneficios de acuerdo a tus necesidades. Pero a pesar de todas sus ventajas, existen muchos mitos sobre las tarjetas de crédito que le cuestan caro a los consumidores y pueden tener un impacto a largo plazo en tus finanzas personales.
Actualmente, sacar una tarjeta de crédito puede ser cosa de minutos, pero antes de aceptar este compromiso es muy importante que conozcas los conceptos erróneos que hay sobre ellas, así podrás evitar problemas al usarlas. Sigue leyendo para conocer 7 mitos de las tarjetas de crédito que te pueden costar mucho dinero.
Mito 1: es mejor pagar con tarjeta de débito que con la de crédito
Aunque parece que las tarjetas de débito y crédito son lo mismo, existen muchas razones para elegir la segunda. Si tienes una tarjeta de crédito que responde a tus hábitos, estilo de vida y compras regulares, podrías obtener recompensas, como puntos o reembolsos en efectivo, cada vez que pagues con ella. Además las tarjetas de crédito cuentan con protecciones contra fraude que protegerán más tu dinero.
Mito 2: dañas tu puntaje crediticio al verificar el crédito de tu tarjeta
La recomendación es que los consumidores verifiquen su crédito por lo menos 1 vez al año, ya que esto les permite revisar la información presentada y así determinar si es precisa. Obtener tu informe crediticio no afecta tu puntaje. No pierdas la oportunidad de hacerlo, para detectar fallas y atenderlas lo antes posible.
Mito 3: hay que tener saldo para generar crédito
Para demostrar un uso responsable de las tarjetas de crédito se deben usar de forma activa, pero no debes tener un saldo enorme. Si vas a usar tu tarjeta de crédito de forma regular, es importante que evites acular un saldo alto, ya que puede resultar en el pago de intereses si no la pagas en su totalidad antes de la fecha de vencimiento. Un saldo que puedas pagar mes con mes con facilidad es la mejor opción. No te excedas si no es una emergencia.
Mito 4: No puedes obtener una tarjeta de crédito con un puntaje bajo
Aunque las tarjetas de crédito con más recompensas y beneficios requieren por lo general puntajes crediticios de al menos 700, existen otras que valen la pena para las personas que aún no alcanzan este número e incluso podrías obtener una tarjeta de crédito asegurada si tienes un crédito imperfecto o limitado. Por lo general, el depósito de garantía mínimo puede ir desde los $50 dólares y algunas cuentan con beneficios como reembolsos en efectivo o sin cobros de tarifas por transacciones.
Mito 5: solo tengo que hacer el pago mínimo
Si decides solo hacer los pagos mínimos de la factura mensual de tu tarjeta de crédito, debes tener muy claro que te tomará más tiempo saldar la deuda. Además, gracias a los intereses y nuevos cargos podrías descubrir que estás sobrepasando tus posibilidades financieras. Se recomienda pagar más del mínimo, con que podrías ver tu puntaje crediticio en aumento a medida que disminuye el saldo.
Mito 6: pagar menos del mínimo no me afecta
Este es uno de los errores que más podría costarte. Si no pagas el mínimo de la factura de tu tarjeta de crédito, la emisora podría reportarlo como un pago omitido. Esto reduce tu puntaje crediticio y hace que sea más difícil calificar para un crédito en el futuro. Como lo mencionamos arriba, pagar más del monto mínimo adeudado es una excelente manera de pagar tu deuda y, hasta que lo pague, se le seguirán cobrando intereses todos los meses.
Mito 7: aumentar el límite de crédito no es una buena idea
Una de las principales razones por las que muchas personas creen esto, es porque se piensa que un límite de crédito más alto aumenta la cantidad de gastos del titular de la tarjeta de crédito. Debemos saber que esto dependerá 100% del nivel de disciplina financiera de cada cliente.
Si eres una persona que usa sus tarjetas de crédito de forma razonable, responsable y cuidadosa, no tienes por qué temerle a una mejora en el límite de crédito. Al contrario, podrían ser una herramienta financiera muy buena en caso de emergencias o donde necesites libertad de movilizar fondos al instante.
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