Fideicomiso: qué es

Los fideicomisos pueden proteger los activos de los acreedores y dictar los términos de la herencia para los beneficiarios; conoce más a fondo qué son

Un fideicomiso es una entidad legal con derechos separados y distintos, similar a una persona o corporación.

Un fideicomiso es una entidad legal con derechos separados y distintos, similar a una persona o corporación. Crédito: Jack_the_sparow | Shutterstock

El fideicomiso es una herramienta legal clave dentro de la planificación patrimonial que permite a una persona transferir la administración de sus activos a un tercero, conocido como fideicomisario, a favor de uno o más beneficiarios. Este mecanismo, utilizado tanto en vida como después del fallecimiento del otorgante, ofrece control, protección y beneficios fiscales en la gestión y distribución del patrimonio. Además, existen diversos tipos de fideicomisos adaptados a diferentes necesidades, lo que lo convierte en un instrumento versátil y estratégico para garantizar el cumplimiento de la voluntad del fideicomitente.

Puntos clave

  • El fideicomiso es una estructura legal para administrar y transferir activos.
  • Existen tres figuras principales: otorgante, fideicomisario y beneficiario.
  • El fideicomiso puede ser revocable o irrevocable, financiado o no financiado.
  • Permite reducir impuestos y evitar la legalización testamentaria.
  • Existen fideicomisos especializados para educación, caridad o necesidades especiales.

¿Qué es un fideicomiso?

Un fideicomiso es un documento legal que se usa para establecer un “recipiente” que contiene activos como dinero o propiedades, que un abogado especializado en planificación patrimonial puede redactar. Los activos de un fideicomiso son administrados por el otorgante o fideicomitente o un por un fideicomisario, que una persona u organización encargada de supervisarlo hasta que los activos se transfieran a los beneficiarios.

Se puede elegir entre varios tipos de fideicomisos que benefician a cónyuges, familiares y organizaciones benéficas; incluso se pueden crear fideicomisos para mascotas. Es importante saber que se pueden establecer términos específicos en el fideicomiso; por ejemplo, nombrar a un hijo como el heredero de un bien hasta que este se gradue de la universidad.

¿Cómo funciona un fideicomiso?

Un fideicomiso, también conocido como fondo fiduciario o cuenta fiduciaria, es un mecanismo legal que garantiza que los activos de una persona se destinen a los beneficiarios específicos. El creador del fideicomiso deposita los activos en la cuenta fiduciaria y autoriza a un fideicomisario a administrarlos en nombre del creador o los beneficios. Los fideicomisos tienen tres participantes principales:

  • Otorgante o fideicomitente: la persona que crea el fideicomiso y deposita los activos en él.
  • Beneficiario: la persona que eventualmente recibe parte o la totalidad de los activos del fideicomiso.
  • Fideicomisario: la organización o persona que administra el fideicomiso.

En esencia un fideicomiso es una entidad legal que posee activos en nombre del fideicomitente y es administrado por un fideicomisario designado. Los activos luego pueden distribuirse a un beneficiario de acuerdo a los documentos del fondo fiduciario. El propósito general de un fideicomiso es administrar el patrimonio, proteger los activos y garantizar que estos se distribuyan según la voluntad del fideicomitente, tanto en vida como después de su fallecimiento.

¿Cuáles son las categorías de los fideicomisos?

Existen diferentes categorías de fideicomisos, cada una con un propósito diferente y entre las más conocidas están:

1. Fideicomiso revocable e irrevocable

Los fideicomisos revocables son los que permiten al otorgante modificar, enmendar o incluso rescindir el fideicomiso durante su vigencia. Estos fideicomisos brindan flexibilidad al otorgante, ya que puede realizar cambios según sea necesario. Mientras que los fideicomisos irrevocables generalmente no se puede modificar una vez creado, aunque existen excepciones para condiciones como el consentimiento del beneficiario. A pesar de carecer de flexibilidad, pueden ser superiores para la protección de activos.

2. Fideicomiso financiado y no financiado

En los fideicomisos financiados el otorgante deposita activos en el fideicomiso durante su vida; mientras que los fideicomisos no financiados consisten únicamente en el contrato del fideicomiso, sin financiación. Estos pueden financiarse al fallecimiento del fideicomitente o permanecer sin ellos.

3. Fideicomiso en vida o testamentario

Los fideicomisos en vida son un documento escrito en el que los activos de una persona se proporcionan como fideicomiso para su uso y beneficio durante su vida. Por otro lado los fideicomisos testamentarios especifican cómo se designan los activos de una persona tras el fallecimiento del fideicomitente y no se establece hasta después del fallecimiento de este último.

¿Cuál es el propósito de un fideicomiso?

El propósito de un fideicomiso varía de persona a persona, pero en general se crea para custodiar bienes o activos en nombre del fideicomitente. La estructura del fideicomiso puede brindar diversas protecciones financieras y legales y permite que los activos incluidos se administren por separado de las finanzas del otorgante.

Esto puede dar una sensación de seguridad, así como una capa extra de privacidad sobre las finanzas personales. Hay que tener en cuenta que los activos de los fideicomisos se distribuyen según los documentos constitutivos, lo que permite al fideicomitente determinar cómo y cuándo se otorgan los fondos de los beneficiarios.

Además los fideicomisos pueden minimizar las obligaciones tributarias y permitir que las familias transmitan más patrimonio a las generaciones futuras. Lo anterior se debe a que los activos dentro del fideicomiso se gravan como un incremento en la base imponible, a diferencia de la base imponible típica. A todo lo anterior se suma que los fideicomisos permiten que los activos eviten la legalización testamentaria y por lo tanto están exentos del mismo tipo de impuestos al patrimonio que se aplicarían al resto de los activos del constituyente.

Tipos específicos de fideicomisos

  • Fideicomiso testamentario: creado de acuerdo a los términos de un testamento; a diferencia de otros fideicomisos, estas cuentas fiduciarias solo se financian tras el fallecimiento.
  • Fideicomiso ciego: permite a los fideicomisarios gestionar los activos del fideicomiso sin el conocimiento de los beneficiarios, lo que podría ser útil si un beneficiario necesita evitar conflictos de intereses.
  • Fideicomiso de anualidades retenidas por el otorgante (GRAT): permite al otorgante depositar ciertos activos en una cuenta fiduciaria temporal y congelar su valor, eliminando la apreciación adicional del patrimonio y entregándolo a los herederos con una mínima responsabilidad fiscal sobre sucesiones o donaciones.
  • Fideicomiso educativo: los beneficiarios solo pueden utilizar el dinero de la cuenta fiduciaria para gastos educativos.
  • Fideicomiso de derrochadores: el fideicomisario decide cómo el beneficiario puede utilizar el dinero.
  • Fideicomiso benéfico: dona los activos de la cuenta fiduciaria a una o más organizaciones benéficas.
  • Fideicomiso para necesidades especiales: apoya a los beneficiarios con necesidades funcionales sin descalificarlos para recibir beneficios gubernamentales como Medicaid o el Ingreso de Seguridad Suplementario (SSI).
  • Fideicomiso de residencia personal calificado: con el que se transfiere una vivienda a los herederos, pero se les otorga el derecho de vivir en ella durante un período específico.
  • Fideicomiso de propiedad con interés terminable calificado (QTIP): cuando fallece el primer cónyuge, los activos en la cuenta fiduciaria sustentan al cónyuge sobreviviente y cuando este fallece, los activos restantes se destinan exclusivamente a los beneficiarios designados por el primer cónyuge.
  • Fideicomisos de salto generacional: con el que se transfiere dinero a nietos o personas al menos 37.5 años menores que el otorgante.
  • Fideicomiso de residencia personal calificado: Este fideicomiso elimina la vivienda o casa de vacaciones de una persona de su patrimonio. Esto podría ser útil si es probable que las propiedades se revaloricen significativamente.
  • Fideicomiso de protección de crédito: a veces llamado fideicomiso de derivación o fideicomiso familiar, permite ceder una cantidad igual o inferior a la exención del impuesto a la herencia. El resto del patrimonio pasa al cónyuge libre de impuestos.
  • Fideicomiso de seguros: protege una póliza de seguro de vida dentro de un fideicomiso, eliminándola así del patrimonio sujeto a impuestos. Si bien una persona ya no puede solicitar préstamos con la póliza como garantía ni cambiar de beneficiario, los fondos pueden utilizarse para pagar los gastos de la herencia tras el fallecimiento.
  • Fideicomiso de acciones separadas: permite establecer un fideicomiso con características diferentes para cada beneficiario.

Conclusiones

El fideicomiso ofrece múltiples beneficios tanto para proteger los bienes como para asegurar su distribución ordenada, eficiente y conforme a los deseos del otorgante. Su uso no está limitado a personas con grandes fortunas, sino que puede ser una solución accesible para cualquiera que busque seguridad y planificación estructurada de su patrimonio.

Al permitir flexibilidad, privacidad y ventajas fiscales, los fideicomisos se han consolidado como una herramienta esencial en la gestión patrimonial moderna. Ya sea para proteger a seres queridos, evitar procesos judiciales largos o asegurar la continuidad del legado familiar, un fideicomiso puede marcar una diferencia significativa en la planificación financiera personal.

FAQS

¿Cuál es la diferencia entre un testamento y un fideicomiso?

Un testamento es un documento legal que proporciona instrucciones para distribuir bienes a los beneficiarios después del fallecimiento. Un fideicomiso es una estructura legal que permite a una persona, conocida como el otorgante o fideicomitente, transferir activos a un fideicomisario para su administración y distribución según la voluntad del otorgante. Los fideicomisos pueden utilizarse tanto en vida como después del fallecimiento, mientras que los testamentos solo surten efecto después del fallecimiento.

¿Cuáles son las implicaciones fiscales de un fideicomiso?

Los fideicomisos irrevocables pueden ofrecer ventajas fiscales al eliminar activos del patrimonio imponible; sin embargo, los fideicomisos revocables no ofrecen este beneficio y los activos se consideran parte de su patrimonio a efectos fiscales.

¿Cuánto dinero se necesita para tener un fideicomiso?

Generalmente los fideicomisos se asocian con las personas muy adineradas, la realidad es que no se requiere una cantidad fija para establecer un fideicomiso. Cualquier persona puede establecer un fideicomiso, independientemente de su nivel de ingresos, si posee activos significativos que valga la pena proteger.

Fuentes del artículo

En esta nota

Glosario Financiero
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain