Lo que necesitas saber para contratar un seguro de vida y que no te cobren de más

El mercado ofrece pólizas por plazos y permanentes para ajustarse a las necesidades del público

La salud y la edad son elementos clave al momento de fijar las pólizas.

La salud y la edad son elementos clave al momento de fijar las pólizas. Crédito: Andrea Piacquadio | Pexels

Enfrentarse a la idea de la muerte siempre representa un reto en particular que nos pone a prueba respecto a lo frágil que puede resultar la vida y lo expuestos que estamos a llegar tarde o temprano al inevitable desenlace, por lo que tomar previsiones en ese sentido puede resultar incómodo, pero necesario.

Al igual que un testamento o incluso unos servicios funerarios, adquirir un seguro de vida significa una declaración de voluntad que anticipa el final, en una decisión que sin duda debe contar con los mejores elementos para que se cumpla a cabalidad con un objetivo que ya no podremos ver.

Tipos de Seguros

Por principio de cuentas, es necesario conocer cuáles son dos los tipos básicos de seguros de vida: a plazos y permanente. El primero solo tiene una vigencia determinada en función de los intereses del asegurado, mientras que el segundo no especula y te acompaña hasta que llegue el momento de la muerte.

Para la mayoría, el seguro de vida temporal es la mejor opción tanto por precio como por la sencillez de su adquisición y entendimiento, se paga una prima considerablemente más barata por un periodo determinado, además de que aparece como una alternativa para proteger a los seres queridos, la gran mayoría de las veces a los hijos, en un periodo en el que son más vulnerables, sobre todo a falta de un patrimonio el cual heredar.

Por su parte, el permanente es considerablemente más caro, ya que la aseguradora debe asumir que eventualmente tendrá que pagar, aunque las primas acumulan una reserva en efectivo que contribuye a seguir abonando a la póliza en los en los años posteriores e incluso puede conceder un reembolso en caso de renunciar al compromiso del seguro; sin embargo, hay ciertos casos en el que este tipo de contratos pueden resultar más atractivos como para quienes cuentan con algún familiar que necesitará asistencia también toda la vida.

Salud y Edad

Estos dos elementos son los más importantes para determinar el valor de las pólizas y las primas individuales a partir de una serie de fórmulas en la que junto a la expectativa de vida arrojan los resultados. Las aseguradoras utilizan datos generales de la población para proyectar el riesgo de muerte, por lo que los costos aumentan a medida en que las personas envejecen.

Asimismo, el tabaquismo juega un rol fundamental en el precio de las primas, ya que incluso puede ser del doble para una persona fumadora, además de que las compañías de seguros piden un examen médico general para ver si no se encuentran indicios de cáncer, diabetes y enfermedades cardíacas para calcular el riesgo.

Por su parte, los historiales de manejo y crediticio de las personas cuentan en esta ecuación, así que si hay antecedentes no favorables en este sentido, las primas pueden experimentar un aumento, al igual que por un trabajo que implique algún riesgo o incluso el hecho de viajar frecuentemente en avión también conlleva una implicación en la póliza.

En esta nota

seguros

Recibe gratis todas las noticias en tu correo

Este sitio está protegido por reCAPTCHA y Google Política de privacidad y Se aplican las Condiciones de servicio.

¡Muchas gracias! Ya estás suscrito a nuestro newsletter

Más sobre este tema
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain