Los pedidos de beneficio de desempleo siguen a la baja, pero el empleo aún no repunta
Las peticiones de ayuda superaron las estimaciones de Wall Street la semana pasada, ya que los economistas encuestados por Dow Jones esperaban 875.000, frente a las 893.000 de la semana anterior
Las reclamaciones de seguro de desempleo por primera vez superaron las estimaciones de Wall Street la semana pasada, ya que la economía de Estados Unidos entra en una nueva etapa crítica.
Las solicitudes de ayuda por desempleo sumaron 860,000 para la semana que terminó el 12 de septiembre, informó el jueves el Departamento de Trabajo.
Las peticiones de ayuda superaron las estimaciones de Wall Street la semana pasada, ya que los economistas encuestados por Dow Jones esperaban 875.000, frente a los 893.000 de la semana anterior.
El número representa un modesto cambio descendente en las solicitudes, que alcanzaron un máximo de 6.9 millones a fines de marzo, cuando la economía se cerró para tratar de frenar la pandemia de coronavirus. Desde entonces, el mercado laboral se ha recuperado, aunque millones siguen desplazados debido a los cierres laborales asociados con las medidas sanitarias
Mohamed El-Erian, asesor económico en jefe de Allianz, tuiteó que las cifras estaban “a un ritmo por debajo de lo que es necesario y posible”, a pesar de que las reclamaciones continuas por primera vez superaron las estimaciones.
Las reclamaciones se habían mantenido por encima de 1 millón por semana hasta finales de agost y a principios de septiembre el Departamento de Trabajo cambió la forma en que ajustó los factores estacionales para dar mejor cuenta de la influencia que las medidas contra el coronavirus han tenido en la economía.
Estados Unidos se enfrenta ahora a nuevos desafíos después de un verano de fuerte crecimiento del empleo. A los economistas y profesionales de la salud les preocupa que un resurgimiento de los casos de COVID-19 pueda detener o revertir la recuperación que la economía ha visto en los últimos meses.
A los economistas les preocupa que el fin de la asistencia del gobierno a los trabajadores desempleados que proporcionaban $600 dólares a la semana además de lo que normalmente recibirían en beneficios profundizaría los problemas en el mercado laboral. Sin embargo, el ritmo de las reclamaciones sigue cayendo, aunque el total sigue considerablemente por encima de todo lo que Estados Unidos había visto antes de la pandemia.