¿Tiene sentido comprar un auto eléctrico para ahorrar dinero?
El precio es más caro, pero hay deducciones. El gasto de energía y mantenimiento es menor. Pero el auto eléctrico se deprecia más... Es decir, hay que echar cuentas. Te explicamos cómo
A medida que la industria automotriz avanza a la era de la electrificación, una de las muchas preguntas que tienen los consumidores a la hora de pensar en hacer la transición de la gasolina a un enchufe tiene que ver con el verdadero potencial de ahorro a largo plazo.
La respuesta corta es sí. Un auto electrificado – híbrido, híbrido enchufaclbe (Plug-in Hybdid) 100% eléctrico o impulsado por celdas de hidrógeno – puede resultar en un costo menor de propiedad y operación a lo largo de la vida del auto. Pero la explicación de ese sí, requiere una explicación un poco más larga y para ser totalmente honestos, algo complicada.
Tenemos que empezar a analizar el precio inicial de un auto eléctrico que puede aumentar en un rango de entre 20 y 50%, dependiendo de la marca, modelo y tecnología, lo que de inmediato la da la ventaja a los vehículos con el tradicional tren motor de combustión interna.
Por supuesto, hay marcas como Tesla que no tienen punto de comparación, porque todos sus modelos son originalmente eléctricos.
Precio de compra más caro, pero con deducción de impuestos
Pero los autos eléctricos, con excepción de los modelos de Chevrolet y Tesla, fabricantes que ya agotaron su cuota de 200,000 vehículos electrificados elegibles para la deducción de $7,500 a los impuestos federales al ingreso, pueden ofrecer un precio más atractivo, gracias a ese beneficio.
Por ejemplo, el MINI Cooper 2020 con motor de gasolina tiene una precio base de $24,250, mientras que el MINI Electric 2020 empieza en los $30,750, antes de deducir los $7,500, lo que lo dejaría en solo $23,250, $1,000 menos que el regular.
Como siempre, hay que tomar en cuenta que estos son los precios “sugeridos por el fabricante”, lo que no quiere decir que sea el precio final que encontrarás en el concesionario, lo que puede ser muy diferente, por lo general, hacia arriba.
Además del incentivo federal, existen otros a nivel estatal, municipal e incluso de algunas empresas que incentivan a sus empleados a adoptar medidas a beneficio del medio ambiente, lo que puede resultar en un precio aún más bajo. Este apartado requiere un análisis individual a fondo.
¿Cuánto se ahorra en combustible?
Después del análisis del precio, hay que hacer la tarea para calcular el costo de la energía necesaria para conducir un promedio de 15,000 millas al año (la media nacional).
Un estudio del Instituto de Investigación de Transporte de la Universidad de Michigan descubrió en 2018 que los vehículos 100% eléctricos tenían entonces un costo promedio anual de operación (energía) de $448 contra $1,117 para un auto con motor de gasolina. Esa diferencia es ligeramente menor hoy, debido a que el precio promedio de la gasolina en 2018 era de $2.90, contra $2.15 de junio 2020.
El análisis a largo plazo favorece una vez más a los autos eléctricos ya que las tarifas de electricidad son mucho más estables que los precios del galón de gasolina. En los últimos 10 años, el costo de la gasolina tuvo una variación entre $1.50 y $4.00 por galón, mientras que en el mismo lapso, el costo de la energía para conducir la misma distancia fue de alrededor de $1.20, con lo que podemos decir que alimentar un automóvil eléctrico es más económico y predecible.
Menor mantenimiento
Los autos eléctricos también tienen ventaja sobre los que operan con motor de gasolina en cuanto al mantenimiento, porque por ejemplo no tienen transmisión, no requieren cambio de aceite y no tienen otros componentes que sufren gran deterioro y tienen un alto costo de reparación.
Por su puesto, los autos eléctricos necesitarán la revisión rutinaria y eventual mantenimiento de los frenos, limpiaparabrisas y el resto de los sistemas, pero estos costos siempre serán menores y las garantías de los componentes eléctricos – motor y baterías – son más amplias que las que se ofrecen para los autos con motor de gasolina, por lo general de 8 a 10 años.
Mayor depreciación
El factor más importante de la ecuación sin duda es la depreciación (valor del auto tras el uso promedio de 3 años) que, según las agencias como Auto Lease Guide (ALG), es mayor en los autos eléctricos debido a factores como demanda – todavía mínima en el mercado general- y reputación de la marca.
Así que, a simple vista, la respuesta sigue siendo sí, pero… depende, quizá, es posible, a veces.
Como dijimos al principio, es un poco más complicado que un sí o un no, y hay que reconocer que, como pasa con todas las tecnologías nuevas, los que las adoptan en sus etapas iniciales siempre pagan más que los que esperan algunos años o generaciones.
Si quieres sacar tus propias conclusiones en base a tus necesidades, gustos y presupuesto, usa la calculadora del Departamento de Energía que toma en cuenta todos los factores anteriores y muchos otros, incluyendo las posibilidades de financiamiento, datos de tu estilo de manejo e información de varios modelos al mismo tiempo.