Qué es y cómo funciona el método de presupuesto basado en cero
Este método te ayuda a cumplir objetivos, pero requieres de disciplina para lograrlo
En el mundo de las finanzas personales existen diversos métodos que te permiten darle un seguimiento a tu dinero sin quebrarte mucho la cabeza y sin que le pierdas el rastro en gastos fantasma. Una de las formas de presupuestar más conocidas es el de “basado en cero”.
Tal como lo señala GOBankingRates, el presupuesto basado en cero es una técnica que te muestra efectivamente dónde puedes gastar tu dinero para alcanzar los objetivos que te propongas, ya sea llegar a fin de mes sin dolores de cabeza, pago de deudas o fines de ahorro.
El funcionamiento de este tipo de presupuesto se enfoca en aportar cada dólar de tus ingresos a un fin específico y que quedes en cero dólares. En pocas palabras, cada dólar y centavo que entra a tus arcas tiene un destino predeterminado sin cambio alguno. La disciplina es importante para cumplir tus metas y una forma de entrenarte es realizando este presupuesto. Con este presupuesto, no debe faltarte ni sobrarte dinero. Si pasa quiere decir que no lo hiciste de manera adecuada y debes asignarlo inmediatamente a un rubro: deudas o ahorro.
¿Pero si hago este presupuesto, cómo voy a tener dinero para la diversión? Porque precisamente tus gastos discrecionales también deben estar contemplados en tu presupuesto basado en cero. De hecho, es uno de los rubros al que, después de tus gastos necesarios, pago de servicios y deudas, debes asignar algo de dinero. Sin embargo, y aquí es donde la disciplina juega un papel importante, no puedes sobrepasarte de la cantidad asignada para ese rubro. Es decir, si contemplas $220 dólares para salir a cenar, no puedes permitirte gastar $250 dólares porque eso significaría que los otros $30 dólares los deberías obtener de otra área y comenzarías a desequilibrar tu presupuesto hasta llegar al descontrol.
Para entenderlo mejor, aquí hay un ejemplo. Supongamos que tienes un ingreso mensual de $3,000 dólares. Esa cantidad debe ser repartida en cada uno de los rubros que consideres. Un posible presupuesto basado en cero sería:
- $1,000 dólares para el pago de la renta
- $250 dólares para el pago de los servicios de la casa (teléfono, agua, luz, internet, entre otros)
- $250 dólares para el pago del automóvil
- $120 dólares para la gasolina
- $300 dólares para alimentos
- $220 dólares para salidas a cenar
- $220 dólares para el pago de la tarjeta de crédito
- $140 dólares para gastos de entretenimiento (salidas al cine, con los amigos y similares)
- $100 dólares para comprar ropa nueva
- $150 dólares para el fondo de emergencia
- $150 dólares para la cuenta de jubilación
- $100 dólares para ahorrar para las próximas vacaciones
La sumatoria de todos estos gastos da un total de $3,000 dólares, misma cantidad de ingresos, por lo que nos deja un restante de cero dólares. Muy bien llevado a cabo del presupuesto basado en cero.
Si existiera algún rubro importante que sea parte de tus necesidades básicas y que no esté contemplado, entonces debes restar esa cantidad a aquellos rubros que no sean importantes como pueden ser el entretenimiento, compra de ropa nueva o salidas a cenar para cubrir la cifra que necesitas para esa área específica.
Como ves en el ejemplo, se cumple la regla mínima del 10% del ahorro de tu salario e incluso se agrega un extra para un fin a corto o mediano plazo como puede ser salir de vacaciones. De aquí su ventaja, ya que los ahorros y el pago de deudas deben estar contemplados sí o sí dentro del presupuesto basado en cero
Una de las desventajas es que requiere de tu completa dedicación para realizar las cuentas específicas de cada rubro sin fallar y disciplina para seguirlo al pie de la letra. Es válido que, por ejemplo, de los gastos previstos para la gasolina puedan sobrarte algunos dólares, pero como se dijo anteriormente, de forma inmediata deben ir al pago de deudas o al ahorro. Lo que no puede pasar en tus cálculos es que te falte dinero, sobre todo para aquellos aspectos importantes de tu vida (vivienda, alimentación y transporte).
Si así lo quieres, puedes apoyarte de la aplicación EveryDollar para darle un seguimiento a tu presupuesto basado en cero.
También debes estar abierto a los cambios, porque hay meses en los que se suman o se restan ciertos gastos. Por ejemplo, para las épocas de declaraciones de impuestos o compras navideñas sería conveniente que dos o tres meses antes puedas llevar parte de tu dinero a ese rubro para que no te agarre desprevenido a la hora de que tengas que pagar tus obligaciones fiscales o adquirir los regalos para tu familia.
La otra gran ventaja de realizar este tipo de presupuesto es que sabes perfectamente en qué se te va cada dólar que ganas y te ayuda a cumplir metas de manera objetiva. Este tipo de método se pule con el tiempo y es recomendable para cualquier tipo de persona, desde un millonario con gastos de su nivel hasta alguien que no tiene ingresos regulares y fluctúa en cantidades disímiles mes con mes. Es posible que al principio no sepas los gastos exactos de cada área, pero con el paso del tiempo te garantizamos que lo perfeccionarás.