Préstamos estudiantiles en EE.UU.: los cambios radicales que se vienen en el sistema federal

Los pagos de los préstamos estudiantiles federales han permanecido en pausa desde que le pegó a Estados Unidos la pandemia del Covid-19. Se espera que pronto se reanuden, pero en lo que sucede, la administración del presidente Joe Biden acaba de anunciar varios cambios que se están proponiendo se apliquen al sistema federal de préstamos para estudiantes en Estados Unidos.

Algunos de estos cambios incluyen medidas que ayudan a cancelar préstamos para beneficiarios que tengan discapacidades físicas y mentales, limitar las tasas de capitalización de intereses y también ayudar a los prestatarios a que trabajen como empleados del servicio público para lograr la condonación de sus préstamos.

Todos estos cambios están siendo propuestos por el Departamento de Educación de Estados Unidos, quienes dieron un adelanto de sus planteamientos mediante un comunicado de prensa. En el mismo, anunciaron que esperaban enviar su plan completo para el 1 de noviembre, con la idea de que todos estos cambios entren en vigor a partir del 1 de julio del 2023.

“Estamos comprometidos a arreglar un sistema roto. Si un prestatario califica para el alivio de préstamos estudiantiles, no debería tomar montañas de papeleo o un título en derecho para obtenerlo. Los beneficios de los préstamos para estudiantes tampoco deberían ser tan difíciles de obtener como para que los prestatarios nunca se beneficien de ellos”, dijo Miguel Cardona, secretario de educación, en un comunicado de prensa. 

Hasta ahora, la administración de Biden ha cancelado casi $26,000 millones de dólares para más de 1.3 millones de prestatarios de préstamos estudiantiles federales.

“Las nuevas propuestas buscan establecer mejoras  duraderas a los programas federales de préstamos para estudiantes que abordan las preocupaciones que el Departamento ha escuchado de los prestatarios y expertos a lo largo del proceso reglamentario” se explica en el comunicado de prensa que fue enviado por el Departamento de Educación.

 Algunos de los cambios que se plantean, son:

1.- Facilitar que los prestatarios presenten reclamos de prácticas depredadoras por parte de las universidades.

2.- Hacer procesos más fáciles para ayudar a que los estudiantes que se inscribieron en las escuelas 180 días antes del cierre de la institución, puedan cancelar sus préstamos. 

3.- Modificar los reglamentos.

4.- Facilitar que los prestatarios que trabajan en el servicio público avancen hacia la condonación.  El Departamento propone permitir que más pagos califiquen para el PSLF (Condonación de Préstamos por Servicio Público), incluidos los pagos parciales, de suma global y atrasados, y permitir ciertos tipos de aplazamientos e indulgencias (como los del servicio del Cuerpo de Paz y AmeriCorps, el servicio de la Guardia Nacional y el servicio militar) para cuentan para el PSLF.

5.- El Departamento propone proteger a los prestatarios de que sus saldos se disparen mediante la eliminación de instancias de capitalización de intereses donde no lo exija la ley.  La capitalización de intereses ocurre cuando los intereses acumulados se agregan al saldo de capital del préstamo, de modo que los intereses futuros se acumulen en una cantidad mayor.

6.- Aquellos que sufran de alguna discapacidad, reciban y mantengan la condonación a la que tienen derecho según la ley.

7.- El Departamento propone simplificar las reglas para cuando una universidad certifique falsamente la elegibilidad de un prestatario para préstamos estudiantiles cuando, de hecho, el estudiante no era elegible.

“Hemos escuchado de los prestatarios que han enfrentado obstáculos al intentar obtener el alivio del préstamo que han obtenido o al que tienen derecho”, dijo James Kvaal, Subsecretario de Educación. 

“Ya sea por bajas escolares cerradas, reclamos de defensa del prestatario, PSLF o alivio después de una discapacidad total y permanente, los prestatarios han tenido que navegar por reglas estrictas y un sistema innecesariamente complicado. Lo que es peor, los prestatarios cuyas escuelas les mintieron no pueden entablar litigios porque sus universidades les impusieron requisitos de arbitraje restrictivos e injustos y prohibiciones de acciones colectivas. Los prestatarios no deberían tener que pasar por obstáculos para obtener el alivio que se merecen. Las regulaciones que hemos propuesto hoy eliminarían muchas de esas barreras y ayudarían a crear un sistema federal de préstamos estudiantiles que funcione mejor para los prestatarios”, añadió Kvaal.

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