¿Rentar o ser propietario de vivienda en la jubilación? Ventajas y desventajas

Solemos imaginar la jubilación como el momento de vivir en una casa con la hipoteca pagada, pero para muchos jubilados rentar podría ser una mejor opción

Más de 7 millones de adultos de 65 años o más alquilan en lugar de ser propietarios de sus viviendas, según el Centro Conjunto de Estudios de Vivienda de la Universidad de Harvard.

Más de 7 millones de adultos de 65 años o más alquilan en lugar de ser propietarios de sus viviendas, según el Centro Conjunto de Estudios de Vivienda de la Universidad de Harvard. Crédito: Tanoy1412 | Shutterstock

Cuando pensamos en la jubilación, muchos imaginan que es el momento en el que se podría vivir en casa con una hipoteca saldada, pero para algunos jubilados alquilar podría ser una mejor opción en sus años dorados. A pesar de que los adultos mayores constituyen la mayor porción de propietarios de viviendas en Estados Unidos, en comparación con otras generaciones, algunos de ellos eligen alquilar en lugar de ser propietarios durante su retiro. 

Y es que rentar podría ser positivo para algunas personas mayores, ya que se evita el costoso mantenimiento de una vivienda y ofrece flexibilidad de movimiento frente a la complejidad de vender una vivienda. “Alquilar suele ofrecer más comodidades, menos mantenimiento y mayor accesibilidad”, de acuerdo a Jennifer Molinsky, directora del programa de vivienda para una sociedad envejecida del Joint Center for Housing Studies. Sigue leyendo para conocer las ventajas y desventajas de rentar o ser propietario de vivienda durante la jubilación

Alquilar puede ser la mejor opción si no estás seguro de dónde quiere establecerte definitivamente durante la jubilación.
Alquilar puede ser la mejor opción si no estás seguro de dónde quiere establecerte definitivamente durante la jubilación.
Crédito: Sorapop Udomsri | Shutterstock

Ventajas de rentar en la jubilación 

Lo primero que debes considerar es que rentar en la jubilación generalmente significa que no se espera que te encargues del mantenimiento de la vivienda y aunque es posible que debas pagar más si vives en una comunidad de jubilados que cobra cuotas de mantenimiento, tendrás la libertad de disfrutar de esta etapa sin la preocupación de hacer reparaciones pequeñas o grandes. 

Además es importante tener en cuenta que los inquilinos no suelen pagar impuestos sobre la propiedad, cuotas de la asociación de propietarios o seguro de vivienda; al menos directamente. Sin estas obligaciones financieras los inquilinos jubilados podrían terminar con más dinero para disfrutar de sus años dorados. 

También es importante poner en la mesa las finanzas personales, pues para algunos alquilar podría ser más asequible que pagar una hipoteca; especialmente si no disponen de un gran capital para invertir, no quieren inmovilizar una gran cantidad de flujo de casa en un solo activo, esperan ahorrar dinero para otros fines como viajes y desean mayor flexibilidad de movimiento. 

Y es que alquilar le permite a los jubilados mudarse cuando deseen o con mayor frecuencia, ya que no están atados a la vivienda. A esto se le suma que pueden buscar un alquiler más económico cuando se termine el contrato de arrendamiento. 

Desventajas de rentar en la jubilación 

Una de las grandes desventajas de alquilar en la jubilación es que los pagos son continuos y no implican la compra de la propiedad; es decir, no hay la posibilidad de aumentar el patrimonio ni de generar valor en una inversión o un activo. Aunque los pagos de la hipoteca pueden ser más altos, con el tiempo se liquida la deuda y te quedas con la propiedad. 

Otra desventaja es que se tienen límites en cuanto a las personalizaciones o cambios que se pueden realizar en los espacios y puedes estar a merced de lo que el propietario quiera hacer; por ejemplo, negarse a realizar reparaciones necesarias que pueden afectar tu calidad de vida. 

A todo lo anterior se le suma que hay una falta de seguridad y permanencia. Podrías renovar tu contrato de arrendamiento una y otra vez, pero eventualmente podrías tener que mudarte y además estás sujeto a aumentos de alquiler que afecten tu presupuesto. 

Ventajas de ser propietario de vivienda en la jubilación 

Ser propietario de una vivienda durante la jubilación te brinda la libertad y flexibilidad de realizarle modificaciones de acuerdo a tus necesidades y estilo de vida. Desde poner rampas, agregar barandales, cambiar los baños, etc. Y si la estabilidad es una prioridad para ti, sin duda es una mejor elección. 

Las hipotecas estándar a 15 o 30 años tienen tasas de interés fijas y pagos mensuales fijos y si se realizan a tiempo, no hay riesgo de perder la vivienda. Este no siempre es el caso con los alquileres. Los jubilados podrían descubrir que sus arrendadores quieren vender la vivienda o subir el precio, a menudo con poca antelación, lo que significaría buscar un nuevo lugar para vivir.

Otra de las grandes ventajas de ser propietario de tu vivienda en la jubilación es que puedes dejar el inmueble como legado para tus hijos, nietos u otro familiar. Muchos jubilados están dispuestos a hacer grandes sacrificios para asegurarse de que sus familiares empiecen con el pie derecho y heredar una casa ya pagada puede ser invaluable. Además los propietarios de vivienda tienen una importante ventaja financiera sobre quienes rentan. 

Los pagos de la hipoteca se destinan directamente al pago inicial de la vivienda y esto ayuda a los jubilados a acumular capital con el tiempo, brindándoles un futuro financiero estable, especialmente si el valor de la vivienda aumenta.

Desventajas de ser propietario de vivienda en la jubilación 

Entre las desventajas de ser propietario de vivienda en la jubilación están los gastos de mantenimiento constantes que implican reparaciones, reemplazo de electrodomésticos, limpieza, jardinería y mucho más. Esto es todavía más frecuente en las casas antiguas o que no han sido renovadas. Estos gastos se pueden hacer más evidentes y difíciles de afrontar a medida que los propietarios envejecen y sus gastos médicos aumentan.

Por otro lado, debes saber que gran parte de tu dinero está inmovilizado en activos no líquidos. Es común saber que propietarios de viviendas reciben una pensión por jubilación, pero no es suficiente para afrontar sus gastos. Con tanto valor invertido en un activo no líquido, vender la vivienda puede ser una mejor opción, ya que el dinero puede usarse para crear una vida mucho más cómoda y segura.

No te pierdas de todas las noticias de Solo Dinero desde su canal de WhatsApp. Suscríbete desde el siguiente enlace.

***

Te podría interesar: 

En esta nota

Jubilación en Estados Unidos
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain