5 errores comunes que se cometen con el gasto del dinero durante la temporada navideña
La falta de presupuesto y el descontrol en las compras son fallas recurrentes a fin de año
La parte final del año ha llegado y con ella una serie de compromisos tanto sociales como afectivos que no solo arrojan una gran derrama en el terreno comercial, para muchas personas también puede implicar un tropiezo por los gastos desmedidos en regalos, compras, alimentos o adornos, por lo que es importante considerar desde un principio cuáles son los límites de dinero con los que se enfrenta esta época y con base en ello disfrutar de las fiestas sin un angustia económica, por lo que compartimos los 5 errores financieros más frecuentes durante la temporada navideña.
1.- Gastarse el bono
Durante diciembre es común que muchos trabajadores reciban un bono de productividad por las labores realizadas a lo largo del año; así que ese dinero extra suele ser un buen pretexto para gastar de más sin medir los límites; sin embargo, este puede ser apenas el primer paso para provocar un hueco en las finanzas personales que impliquen más deudas, por lo que la recomendación es reservar el 30% del bono para afrontar los gastos imprevistos y estar mejor preparados económicamente con miras al siguiente año.
2.- Contraer deudas
El no presupuestar los gastos navideños puede tener peligrosas consecuencias en términos financieros, ya que no solo se trata de los tradicionales regalos para familiares y amigos, también conlleva otro tipo de erogaciones como alimentos de la temporada o decoraciones, los cuales implican alrededor del 35% del dinero que se destina a esta época del año, así que cuando el dinero se termina, la primera opción es contraer algún tipo de deuda, por lo general con las tarjetas de crédito, lo que puede representar un compromiso adicional por años.
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3.- Compras compulsivas
No todo lo que se encuentra en las ofertas de temporada es algo que en verdad se necesite, así que es importante no dejarse llevar por artículos que no se tenían considerados tan solo porque dichos productos tengan descuentos aparentemente irresistibles. Así que ante un posible ataque de compras por estrés, lo mejor es tomarse un respiro para dejar que el impulso se contenga y preguntarse si eso que se quiere comprar hará falta en los próximos tres meses, esto, con el objetivo de comenzar un razonamiento respecto a la compra y tomar una mejor decisión con la cabeza fría.
4.- Desatender obligaciones
Incluso en un entorno de distanciamiento social recomendado en medio de la pandemia, la temporada llega con regalos, comidas, adornos y otros gastos, que sumados al dinero extra con el que se cuenta, parecen borrar los demás compromisos financieros que se tienen sin importar la época, por lo que no es difícil encontrar escenarios en los que el dinero se ha terminado antes de que finalice el año. Para contrarrestar esto, lo más importante es contar con una lista que permita tener un mayor control y evitar estos inconvenientes de dinero.
5.- No programar gastos
Llegar a la temporada navideña sin un plan financiero puede ser muy costoso en cuanto al potencial endeudamiento que puede provocar, por lo que lo más sano es elaborar un presupuesto con suficiente anticipación que permita programar los gastos y ceñirse a él con rigor si se quiere evitar un tropiezo económico. Es importante desglosar todo el recurso que se ocupará durante toda la temporada, comenzando desde los compromisos fijos, hasta los regalos, pasando por las cenas, adornos y demás tentaciones comerciales que genera la Navidad.