Cómo puedes cambiar tu número del Seguro Social y en qué circunstancias es válido

La Administración del Seguro Social permite que las personas cambien su número de Seguro Social, pero solo en situaciones muy limitadas y necesitará documentar el motivo

La Administración del Seguro Social no recomienda cambiar el número, salvo en algunos casos.

La Administración del Seguro Social no recomienda cambiar el número, salvo en algunos casos. Crédito: Valerie Macon | Getty Images

El número del Seguro Social es único, intransferible y está pensado para mantenerse por el resto de la vida del titular en cuanto lo obtenga. Sin embargo, en algunas ocasiones, la Administración del Seguro Social (SSA) permite a ciertas personas cambiar el número que se les asignó.

Para que una persona pueda cambiar el número de Seguro Social debe proporcionar pruebas que justifiquen el cambio, según los criterios de la SSA. Entre las circunstancias admisibles está que el número actual le esté causando problemas o pueda sufrir algún daño temporal o permanente en caso de no realizarse el cambio.

Aunque la lista de razones para que se te permita un cambio de número de Seguro Social es limitada, la encabeza haber sido víctima de un daño financiera causado por el robo de identidad o que la vida de la persona esté en peligro debido a violencia doméstica, entre otras.

La SSA desaconseja hacer este trámite, ya que podrías tener otro tipo de inconvenientes, sin embargo, si así lo necesitas, debes hacerlo en persona en una de las oficinas del Seguro Social, haciendo una cita con anticipación.

Cada situación es particular y requiere de ciertas comprobaciones, pero para solicitar el cambio debes completar un formulario del SSA para una nueva tarjeta y proporcionar una declaración por escrito de por qué necesitas un nuevo número de Seguro Social. También debes proporcionar documentos originales de identidad y agregar, en la mayoría de los trámites, evidencia de cambio de nombre legal, prueba de edad y ciudadanía estadounidense o estado migratorio autorizado para trabajar.

En caso de que la SSA acuerde que una persona es elegible para cambiar su número, aún conservará su número anterior para el mantenimiento de registros de la agencia. Esto asegura que todas las contribuciones, tanto en el número original como en el nuevo, se contabilicen para la misma persona. Asimismo, las instituciones financieras o agencias estatales aún pueden utilizar el número original además del nuevo número.

Cuando una persona vive “una situación de acoso, abuso o peligro para la vida”, la SSA podría emitir un nuevo número de Seguro Social para ayudar a garantizar la seguridad de la persona en cuestión. Se requerirá documentación, como informes policiales y/u órdenes de restricción o registros médicos de lesiones. Además, se deberá proporcionar cartas de personas con conocimiento directo del abuso, violencia doméstica y/o acoso, como consejeros, amigos o miembros de la familia.

Si la persona necesitara realizar un cambio de nombre, entonces deberá hacerlo primero antes de solicitar el cambio de número de Seguro Social.

En casos más reducidos, la SSA también puede aceptar un cambio de número por objeciones religiosas o culturales. Hay números que la agencia no emiten para evitar estas situaciones, pero si sucediera, la SSA necesitará “documentación escrita que respalde la objeción de un grupo religioso con el que el poseedor del número tiene una relación establecida”.

También se dan los casos de duplicación. Según un estudio de ID Analytics de 2010, unos 40 millones de personas, que es una de cada siete en aquel momento, tenían un número que era utilizado por más de una persona. Aunque esto se puede deber por errores administrativos, también podría deberse a actor fraudulentos, ya sea para actos delictivos o incluso migratorios.

Aunque el robo de identidad es una situación para emitir un nuevo número de seguro social, la SSA tiene muchas restricciones. De antemano, debe demostrar haber agotado todos los medios posibles de seguridad para resolver el problema. Una víctima de robo de identidad tiene que demostrar con documentos de terceros que su número se está utilizando para transacciones fraudulentas. Se debe probar que el uso del número de seguro social original sigue causando daño, como la denegación de préstamos o la afectación continua de la calificación crediticia. La SSA proporciona una guía para las víctimas de robo de identidad.

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