Cómo saber si comprar una casa rodante es una buena inversión frente a los altos precios de las viviendas en Estados Unidos

¿Qué es lo primero que piensas cuando lees/oyes la palabra “casa rodante”? Las casas móviles, mejor conocidas como casas rodantes, suelen estar acompañadas de infinidad de mitos al respecto. Posiblemente, piensas que está destinada para personas de bajos recursos, vidas con problemas financieros y un largo etcétera de la misma índole. Hoy en día se convierten en una opción más para tener un hogar ante la imposibilidad de muchos de comprar una casa tradicional en Estados Unidos, debido a los altos precios de los bienes raíces.

Para empezar, aunque popularmente se les conoce como “casas rodantes”, el nombre oficial de las viviendas móviles es el de casas prefabricadas, según las normas federales adoptadas desde 1976. De acuerdo con datos del gobierno de EE.UU., más de 20 millones de personas viven en casas prefabricadas. Esa cantidad es más que la suma de las personas que viven en viviendas públicas o de alquiler subvencionadas por el gobierno.

A pesar de que son muchas las voces, entre políticos y expertos, que consideran que las casas prefabricadas son un problema, un nuevo análisis realizado por especialistas en vivienda de The Conversation, sugiere que estas opciones de vivienda pueden ser una parte de la solución de la crisis inmobiliaria actual. De acuerdo con ellos, estas son algunas de las percepciones erróneas en torno a este tipo de propiedades y que precisamente impiden que se vean como una inversión personal y familiar viable.

1. Las casas prefabricadas no son sinónimo de mala calidad

Aunque la estructura de estas casas debe cumplir con normas claras de seguridad federales desde 1976, muchas personas consideran que están mal construidas y son deficientes. De hecho, estas reglas se actualizan periódicamente con base en las catástrofes acaecidas en el país.

Una casa que cumpla con esta normatividad, bien instalada, puede compararse fácilmente con las edificadas y pueden resistir inclemencias como viento, fuego u otro tipo de amenazas de desastre. Además, el precio por pie cuadrado de una casa prefabricada suele ser de la mitad en comparación con las construidas sobre suelo. La investigación sugiere que muchos de los problemas asociados con estas viviendas se deben más a problemas de instalación, mantenimiento de los parques y fallas de infraestructura.

2. Los propietarios de casas ya pueden ser dueños del suelo

En Estados Unidos, existen terrenos conocidos como parques de casas móviles. En estos lugares, una comunidad de casas prefabricadas se establece por medio de rentas de uso de suelo. Si bien son dueños de sus viviendas, no suelen serlo del asentamiento. En los últimos años, esto ya ha cambiado. Los habitantes de más de 1,000 parques de casas prefabricadas en el país han adquirido en conjunto sus tierras, creando la cooperativa Resident Owned Communities (ROC USA).

Hasta hoy, 20 estados han adoptado leyes que ayudan a los residentes a comprar los parques de casas donde viven. Ese tipo de políticas ayudó a ROC USA, una empresa social sin fines de lucro, a crear una red de más de 280 comunidades de propiedad cooperativa de capital limitado que albergan a más de 18,000 hogares que son propiedad de sus habitantes.

3. Las casas prefabricadas se encuentran cada vez más en zonas urbanas

Muchas personas suelen considerar que este tipo de casas sólo se encuentran en zonas rurales o de baja densidad poblacional. Ha cambiado con el tiempo. Un 61% de todas las casas prefabricadas están ubicadas en un área metropolitana y un 8% en centros urbanos.

Por sus características y asequibilidad, en más de tres décadas ninguna comunidad de ROC USA ha fallado en pagas sus préstamos o vendidos sus parques.

Si esto no fuera suficiente, estas comunidades suelen ser más conscientes de las necesidades ambientales, construyen sus propios refugios contra tormentas y centros comunitarios, mejoran las redes de drenaje, facilitan respuestas de emergencia, invierten en energía renovable y se vuelven más autosustentables, reduciendo las emisiones de gases invernaderos y los costos para sus habitantes.

La administración de Biden incluye un amplio apoyo a los parques de casas prefabricadas dentro de su plan de viviendas de 2022. De alguna manera, se espera que este tipo de viviendas se expandan. Sólo que debes tomar en cuenta algo: de lograr su masificación, las viviendas podrían subir de valor a diferencia de lo que están actualmente.

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