Beneficiario: qué es

Una parte importante de tener productos financieros, como un seguro de vida, es designar a los beneficiarios; conoce qué son, los tipos y su importancia

Un beneficiario es una persona o entidad que hereda la propiedad de tus activos.

Un beneficiario es una persona o entidad que hereda la propiedad de tus activos. Crédito: William Potter | Shutterstock

Un beneficiario es la persona, grupo o entidad designada para recibir los beneficios o activos derivados de un acuerdo contractual, como un testamento, fideicomiso o póliza de seguro. Este concepto asegura que se respeten los deseos del otorgante, optimizando la distribución de bienes y evitando procesos legales prolongados. Además, elegir y gestionar beneficiarios correctamente puede tener implicaciones legales, fiscales y emocionales significativas para todas las partes involucradas. Sigue leyendo para conocer más a detalle qué es un beneficiario, los tipos que hay, su importancia y más.

Puntos clave

  • Los beneficiarios pueden ser principales, contingentes, revocables o irrevocables.
  • Es posible nombrar individuos, organizaciones o fideicomisos como beneficiarios.
  • Designar beneficiarios garantiza una distribución rápida y evita procesos sucesorios complicados.
  • Cambiar beneficiarios es posible según el tipo de activo, pero puede requerir documentación y permisos.
  • Los beneficiarios tienen derechos y responsabilidades, como pagar impuestos y resolver disputas.

¿Qué es un beneficiario?

Un beneficiario es una persona, grupo o entidad designada para recibir beneficios, activos o derechos de un testamento, fideicomiso, póliza de seguro o algún otro acuerdo contractual. Los beneficiarios son los destinatarios de los ingresos o beneficios y garantizan que se respeten los deseos del otorgante o asegurado. La palabra “beneficiario” se deriva del latín “beneficios”, que significa beneficio o privilegio e históricamente se usaba en contextos legales para designar a alguien que se beneficia de una acción o acuerdo en particular.

Existen reglas relativamente amplias con respecto a quién o qué puede ser nombrado un beneficiario, entre estos se encuentran:

  • Un individuo.
  • Dos o más personas.
  • Tu patrimonio.
  • Una organización benéfica.
  • Un fideicomisario de un fideicomiso que haya creado.

Si no se nombra a una persona o entidad específica como beneficiario, el beneficio por fallecimiento se pagará al patrimonio de forma predeterminada. Esto puede implicar un proceso sucesorio prolongado, que puede retrasar el desembolso de dinero a los herederos; por lo que es importe nombre a un beneficiario donde aplica para garantizar un proceso sin problemas.

¿Qué tipos de beneficiarios existen?

1. Beneficiarios principales

Los beneficiarios principales son la primera opción. Es la primera persona que recibirá el beneficio por fallecimiento de su aseguradora de vida o el destinatario principal de los activos en el testamento. Los beneficiarios principales suelen ser alguien que sufriría económicamente en caso de muerte, como un cónyuge.

2. Beneficiarios contingentes

Los beneficiarios contingentes, también conocidos como beneficiarios secundarios o alternativos, recibirán los activos o beneficios de la cuenta si el beneficiario principal ha fallecido o no puede ser localiza. Se pueden nombrar a varios beneficiarios contingentes y especificar lo que recibirá cada uno.

3. Beneficiarios revocables

Los beneficiarios revocables se pueden cambiar sin el permiso del beneficiario, siempre y cuando el titular o benefactor aún está vivo.

4. Beneficiarios irrevocables

Los beneficiarios irrevocables no se pueden cambiar sin el permiso por escrito del beneficiario. Si hay varios, todas las partes involucradas deben dar su consentimiento para cualquier cambio. Se pueden nombrar beneficiarios irrevocables como parte de un acuerdo de divorcio o alguna otra circunstancia especial.

¿Cómo elegir un beneficiario?

Se puede elegir un beneficiario o dividir los activos entre varios de ellos. La mayoría de las pólizas de seguro exigirán que se seleccione a un beneficiario principal y uno secundario. Toma en cuenta que pueden existir consecuencias fiscales para los beneficiarios según su lugar de residencia.

Otro punto a tomar en cuenta es que el estado donde reside o el proveedor de seguro pueden restringir a quién se puede nombrar como beneficiario de un seguro de vida. En algunos estados es posible que se deba a incluir al cónyuge como el beneficiario principal y asignarle al menos el 50% de los beneficios; en otros, se necesitará el permiso por escrito del cónyuge para nombrar a otra persona.

Debes saber que también puedes designar un fideicomiso como beneficiario. Un fideicomiso es una entidad legal separada, que brinca un mayor control sobre la distribución de activos y pueden ayudar al benefactor a navegar por situaciones patrimoniales complicadas, como nombrar a un menor o dependiente como beneficiario.

Por última, toma en cuenta que también se puede nombrar a una organización benéfica o sin fines de lucro como beneficiario, para que reciban la totalidad o parte de los activos en cuestión.

¿Se pueden cambiar los beneficiarios?

En general, sí se pueden cambiar los beneficiarios en cualquier momento. Por eso se recomienda revisar el testamento tras un evento significativo en la vida, como un matrimonio, divorcio, muerte o la llegada de hijos o nietos. Estos son los cambios que puedes realizar de acuerdo al tipo de cuenta:

1. Póliza de seguro de vida

Se puede cambiar a los beneficiarios comunicándose con su proveedor de seguros. Es probable que se deba completar un formulario para confirmar la modificación y se necesitará el consentimiento del beneficiario para cambiar su estado si fue designado como irrevocable.

2. Cuenta financiera

Cuando hablamos de cuentas de jubilación o de inversión, es importante comunicarse directamente con la institución financiera. Si se recibe beneficios a través del empleador, probablemente se tendrá la oportunidad de revisar las opciones de póliza durante el período de inscripción anual.

3. Testamento

Se puede realizar un cambio de beneficiario en un testamento agregando un codicilo, que es un documento legal que lo modifica. Las leyes varían dependiendo el estado, pero generalmente se necesitarán dos testigos para certificar un codicilo. Si se van a hacer cambios importantes, es mejor crear un nuevo testamento y destruir el anterior.

Beneficiarios e sus implicaciones legales

Los beneficiarios tienen derechos, pero también responsabilidades. Es muy probable que deban proporcionar documentación, pagar impuestos sobre los montos heredados e incluso gestionar disputas entre varios beneficiarios.

1. Derechos de los beneficiarios

  • Los beneficiarios tienen derecho a recibir información sobre el patrimonio y los activos específicos que heredan.
  • Los beneficiarios pueden recibir activos de acuerdo a lo estipulado en el testamento o documento de fideicomiso.
  • Los beneficiarios pueden esperar transparencia y responsabilidad de los ejecutores o fideicomisarios que administran el patrimonio.

2. Responsabilidades de los beneficiarios

  • El pago de impuestos sobre los montos heredados, responsabilidad de los beneficiarios, puede incluir impuestos a la herencia o impuestos a la renta sobre las distribuciones del patrimonio.
  • La gestión de posibles disputas entre varios beneficiarios puede implicar negociaciones o procedimientos legales para resolver reclamos y distribuir el patrimonio de manera justa.
  • Los beneficiarios deberán proporcionar la documentación necesaria para demostrar su identidad y validar su derecho a los activos.

Importancia de los beneficiarios

Es importante designar un beneficiario por varias razones. La primera es que al hacerlo, se garantiza que los activos vayan a las personas o entidades correctas; pero más que esto, designar un beneficiario tiene ventajas fiscales para quienes reciben el dinero o activos.

Designar un beneficiario también permite que familiares y amigos omitan el proceso de sucesión, donde los activos se venden y distribuyen. Este proceso generalmente no resulta positivo para los beneficiarios; por el contrario, es un paso más por el que deben pasar los herederos y la sucesión pueden tomar meses e incluso años.

Designar un beneficiario es crucial, ya que garantiza que los bienes del fallecido o benefactor lleguen a quienes la persona realmente desea. Especificar quién debe recibir qué, hace que el proceso de distribución de herencias sea más rápido y fácil.

Conclusiones

Designar a un beneficiario es una decisión clave que impacta el destino de los activos y la protección financiera de los herederos. Además de garantizar que los bienes lleguen a las personas o entidades deseadas, este proceso ayuda a evitar complicaciones legales y a reducir el tiempo y costos asociados a la sucesión. Es crucial mantener actualizada esta designación tras eventos importantes en la vida, como matrimonios, divorcios o nacimientos.

Por último, considerar las implicaciones fiscales y legales al nombrar beneficiarios es fundamental para evitar sorpresas desagradables. Ya sea designando a un individuo, fideicomiso u organización, una planificación cuidadosa asegura que el legado de la persona benefactora se administre conforme a sus deseos, facilitando un proceso más eficiente y armonioso para todas las partes involucradas.

FAQs

¿Cuáles son las implicaciones fiscales para los beneficiarios?

De acuerdo a la jurisdicción, los beneficiarios pueden enfrentarse a impuestos sobre sucesiones, herencias e incluso sobre la renta por determinados tipos de activos heredados. Los beneficiarios deben consultar con profesionales en la materia de impuestos para abordar estas complejidades.

¿Un testamento puede anular las designaciones de beneficiarios?

En la mayoría de los casos, una designación de beneficiario en una póliza de seguro de vida anula un testamento; así que si se cambia el testamento, pero no se actualiza la póliza de seguro de vida y la designación de otros beneficiarios para que coincidan, los activos seguirán yendo al beneficiario original.

¿Los niños pueden ser beneficiarios?

Un niño menor de 18 años puede ser nombrado beneficiario, pero puede haber algunas limitaciones legales. Si el niño es menor de edad cuando el benefactor muere, los bienes pueden pasar a su tutor legal hasta que alcance la mayoría de edad y en algunos casos, esto puede complicar el proceso de pago o retrasar el acceso del niño. En estos casos, puede ser útil establecer un fideicomiso, que puede actuar como beneficiario en lugar del niño.

¿Qué sucede si no se elige un beneficiario?

Si no se nombra a un beneficiario, el pago de los beneficios del seguro podría demorarse hasta que la compañía o el tribunal estatal determinen a dónde o a quién debe ir. La mayoría de las pólizas de seguro de vida tienen una orden de pago predeterminada y pueden terminar pagándose al patrimonio.

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