Buscan cambiar la forma en la que se calcula el COLA para los beneficios del Seguro Social

Cada año, la Administración del Seguro Social (SSA, por sus siglas en inglés) analiza la inflación y los índices de precios al consumidor para establecer los porcentajes que el Ajuste por Costo de Vida (COLA, por sus siglas en inglés), traerá para el año venidero y que se reflejará en los beneficios de que reciben los jubilados.

Para el año 2022, el COLA fue del 5.9%, esto quiere decir que los jubilados están recibiendo el 5.9% de más en sus beneficios mensuales, lo que representa unos 90 dólares extras en cada cheque de pago. La idea principal de estos ajustes es ayudar a las personas de la tercera edad a mantener su poder de compra frente a la inflación, que afecta a alimentos, servicios básicos, gasolina, ropa y otros productos más. 

Los informes más recientes han concluido que los ajustes por el COLA no son lo suficientemente altos como para que las personas de la tercera edad le puedan hacer frente a los elevados precios de los productos y los servicios. En pocas palabras, el COLA se queda corto, ya que la inflación lo ha superado con creces.

La Liga de Ciudadanos de la Tercera Edad pide entonces que el COLA se calcule de una manera diferente ya que, según ven, ahí está el problema de que no le alcance el dinero a los jubilados. El COLA del Seguro Social se basa en los datos del tercer trimestre del Índice de Precios al Consumidor para Asalariados Urbanos y Trabajadores Administrativos, o CPI-W, por sus siglas en inglés.

En base a esto, se estima que el COLA podría superar el 8% para el 2023, aunque aún no entramos al tercer trimestre del año, pero de hacerse realidad, sería el aumento más grande que los jubilados podrían recibir en décadas.

De acuerdo a los expertos de The Mootley Fool, los COLA del Seguro Social tienen un largo historial de no ayudar a las personas mayores a mantenerse al día con los costos de vida. Ayudaría si se cambia la manera de calcularse.

Actualmente, un grupo de legisladores está presionando para que se use el CPI-E o también llamado Índice de Precios al Consumidor para Ancianos para poder calcular los porcentajes en los que se incrementará el COLA de los años venideros.

La presión que se ejerce para que se haga el cálculo con estos índices es que tendría una mejor visión de los costos específicos para las personas mayores, a diferencia de como ocurre con el CPI-W, que se basa principalmente en medir costos como el de la gasolina, que puede no ser tan importante para los jubilados.

Aunque por ahora es solo una propuesta, falta ver el impulso que toma durante los siguientes días.

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