¿Cuántas tarjetas de crédito es bueno tener y cómo afecta a tu puntaje de crédito?
Descubre si tener más de una tarjeta de crédito es conveniente o no para ti
Estados Unidos es uno de los países donde las personas tienen más tarjetas de crédito en el mundo. Hay una amplia variedad en el mercado para satisfacer las diferentes necesidades de sus clientes. ¿Pero cuántas tarjetas de crédito es bueno tener? Además, en la respuesta a esta pregunta, es importante mirar cómo afecta tu puntaje de crédito, el número que finalmente va a indicar cómo es tu responsabilidad financiera en las deudas y por el que, finalmente, podrían aceptarte o rechazarte en cada nueva línea de crédito.
Las consideraciones previas
Responder a esta cuestión realmente dependerá en buena medida en la persona que se la realice. Algunos asuntos que tienes que considerar son si tienes problemas crediticios, dificultades para llegar a fin de mes, tu relación deuda-ingreso, entre otras, frente a aquellas personas que están libres de deudas o con un ingreso base estable y alto.
También otro punto importante es el para qué las ocupas. Si con una o dos tarjetas de crédito eres eficiente, pagas a tiempo tus facturas y te sirve para comprar tus necesidades, entonces, ¿para qué buscar más plásticos que llenen la cartera y tus angustias?
Antes de seguir, podríamos afirmar que no hay un número exacto de tarjetas de crédito y en buena medida dependerá de cómo funciones con ellas: si vives tranquilo y además puedes realizar compras que de otra manera no harías, tienes las necesarias; pero si estás teniendo problemas de endeudamiento, así sea con una sola tarjeta de crédito, podríamos estar hablando de que tienes muchas al alcance de tu mano.
¿Es cierto que entre más tarjetas de crédito mejor puntaje crediticio?
De manera llana, sí. Aunque cuando se habla de adquirir deudas nada es tan simple como parece.
La base para afirmar que es bueno tener muchas tarjetas de crédito cuando se toca el tema del puntaje, tiene que ver con tu límite y tasa de utilización de crédito. El límite de crédito se mide a partir de las cantidades máximas de tus líneas abiertas. La tasa de utilización de crédito se obtiene de la cantidad de crédito que has utilizado frente a la cantidad que tienes como límite. Por ejemplo, si tienes dos tarjetas de crédito, una con un límite de crédito de $1,000 dólares y la otra con $2,000 dólares y, sin importar en cuál, has utilizado $500 dólares de crédito, entonces tienes una tasa de utilización de crédito del 16.66% ($3,000 dólares totales entre $500 dólares que ocupas).
La tasa de utilización de crédito recomendable siempre tiene que ser inferior al 30%. Tenerlo así genera que mantengas un puntaje de crédito sano (claro, siempre y cuando pagues a tiempo tus facturas). Entre más líneas de crédito tienes, evidentemente más límite aparece en tu puntaje y, salvo que hagas un uso indiscriminado de tus plásticos, la lógica indicaría que tu tasa de utilización siempre va a ser inferior al 30%, lo cual beneficia a tu puntaje. Si tu índice de utilización no supera el 10% es altamente positivo para ti y tu puntaje.
¿Cómo manejar tantas tarjetas de crédito?
Aquí es donde puede complicarse la vida de la persona. Todo depende de cómo uses tus tarjetas de crédito. Sin importar cuántas tengas, si no pagas tus facturas, todo lo que podría ser positivo para ti y tu puntaje se tornará de inmediato en un hoyo negro de deuda.
No importa si tienes una, dos, diez o más tarjetas de crédito, mientras solventes cada una de tus facturas. Dependiendo del tipo de tarjeta de crédito que tengas, no utilizarla en muchas ocasiones no afecta a tu puntaje. Lo único que se te recomienda es no dejarla inactiva por mucho tiempo para que no sea cancelada o comience a dañar tu puntaje de crédito.
Cancelar una tarjeta, a menos de que sea franca y personalmente problemático para ti por alguna razón, no suele ser una buena idea.
También considera que muchas de estas tarjetas de crédito cobran anualidades que se puede compensar con tu uso. De hecho, es una estrategia que las compañías tienen para asegurarse de que ocupes tu plástico con frecuencia. También las recompensas son parte de ese gancho.
“¡Sí, son una maldita molestia! Si realmente no estás usando la tarjeta o las recompensas, probablemente no tenga sentido pagarla”, menciona Mel Magazine. Por eso siempre busca opciones con bajas tasas de interés y una anualidad accesible para tus posibilidades.