¿Puedo obtener un préstamo personal para salir del paso si estoy desempleado?
Hay préstamos accesibles para personas desempleadas, pero debes tener cuidado con las altas tasas de interés
En muchos de los préstamos para desempleados debes dejar alguna garantía como puede ser un automóvil. Crédito: Susan Sewert | Pixabay
Cuando estás desempleado, cuando más necesitas dinero, es difícil que puedas obtener un préstamo precisamente por tu condición laboral actual, porque la mayoría de los prestamistas quieren tener la seguridad de que les pagarás y demostrar que tienes trabajo es una forma de asegurarse. Sin embargo, cuando se trata de productos financieros, existen aquellos préstamos a los que podrías calificar. Eso sí, con tasas de interés muy elevadas.
Estos tipos de préstamos se caracterizan por tomar en cuenta tus pagos por desempleo, discapacidad o pensión alimenticia como parte de tus ingresos regulares, por lo que ofrecen un préstamo a tus posibilidades.
Estos son algunos de los préstamos a los que puedes acceder como desempleado.
Préstamo contra tu casa o seguro de vida
Una línea de crédito con garantía hipotecaria, conocida como HELOC, es un tipo de préstamo que se asemeja a tener una tarjeta de crédito con saldo renovable.
Investopedia explica que el método es utilizar el valor líquido de tu vivienda como garantía, es decir, la diferencia entre el valor de tu vivienda y el saldo de tu hipoteca. Dado que los préstamos están asegurados contra el valor de la equidad de su vivienda, los préstamos sobre la equidad de la vivienda ofrecen tasas de interés extremadamente competitivas, generalmente cercanas a las de las primeras hipotecas.
Las pólizas de seguro de vida completas también cuentan con un apartado donde puedes solicitar un préstamo del valor de tu póliza. Hacerlo genera que tu beneficio se reduzca hasta que lo pagues completamente.
Préstamo sobre el título del automóvil
Similar a los HELOC, existen prestamistas que podrían darte dinero por el valor del automóvil, artículo que queda como garantía para el pago. Se pone el título a nombre de la compañía, el cual permanece como dueño del vehículo hasta que reembolses el préstamo.
The balance señala que, como muchas otras opciones, las compañías de préstamos sobre el título del automóvil requieren ingresos regulares, pero la mayoría aceptará cheques como prueba. Muchas aplicaciones están disponibles en línea y luego te piden que traigas el automóvil para que lo inspeccionen en persona, y algunas incluso pueden hacerlo todo a la vez.
Préstamo con un cofirmante
Un amigo o familiar con buen crédito puede ayudarte a conseguir este préstamo. Lo único que se requiere es que ambos firmen el préstamo. Aún tienes que demostrar una fuente de ingresos, pero el hecho de que alguien te ampare facilita el proceso.
Sólo sé considerado con tu cofirmante, porque si no pagas a tiempo, podrías dañar también el puntaje de crédito de la persona que te ayudó a obtener el préstamo.
Casas de empeño
Si no tienes ningún ingreso, ésta puede ser la mejor opción, ya que te prestan con base en el valor del artículo que lleves y lo peor que puede pasar es que no lo puedas tener de regreso si no pagas. Tus objetos serán tasados al llevarlos, generalmente por un valor mucho menor al real.
Además, otra ventaja de las casas de empeño, es que no sufres daño en tu puntaje de crédito.
Los no recomendables
Si bien te pueden sacar de un apuro, en Solo Dinero te recomendamos no hacer uso de los siguientes tipos de préstamo:
- Adelantos en efectivo. Es un préstamo de tu tarjeta de crédito en la que te permiten tomar efectivo de tu límite. El gran inconveniente es que suelen tener altas tasas de interés.
- Prestamos de día de pago. Muchos de estos préstamos aceptan a desempleados, personas con discapacidad o que tengan pensión alimenticia. Pero aunque te pueden dar más efectivo que los adelantos de la tarjeta de crédito, también manejan altas tasas de interés.
Ten mucho cuidado de solicitar este tipo de préstamos porque ante un ingreso irregular o nulo, podrías afectar seriamente tu puntaje de crédito y hacer que tu deuda sea tan grande que se convierta en impagable.
