¿Te arrepientes de dejar tu trabajo? Hay 5 razones para no sentirte mal

Muchas personas que se sumaron a la Gran Renuncia se arrepintieron de haberlo hecho, pero pierden de vista que algunas razones fueron importantes para abandonar el empleo

arrepentimiento de renuncia

Según un estudio en abril de este año, uno de cada cinco personas que abandonaron su empleo, se arrepintieron; pero, ¿deberían sentirse mal por ello? Crédito: Shutterstock

Si eres de las personas que se unió a la ola de la Gran Renuncia en Estados Unidos de los últimos meses y te arrepientes de haberlo hecho, este artículo es para ti. Queremos decirte que no eres el único, muchas personas se sienten mal de haber abandonado su antiguo empleo, sin importar si continúan desempleados o incluso consiguieron uno “mejor”. No obstante, dependiendo de tus circunstancias personales, ese impulso de salirte fue sustentado por cuestiones justificables que queremos recordarte. Aquí te dejamos 5 razones para no sentirte mal por dejar tu trabajo.

En abril de este año, una encuesta encontró que de entre los 47 millones de personas que renunciaron a sus trabajados durante la llamada Gran Renuncia el año pasado, aproximadamente una de cada cinco de esas personas se arrepentían de haberlo hecho. Eso significa que cerca de 10 millones de trabajadores quisieran regresar a su antiguo trabajo.

Muchas personas enfrentan sentimientos encontrados después de dejar un trabajo. Algunas personas renuncian por infelicidad o por agotamiento. Otros pueden renunciar por necesidad, como saber que ya no puede avanzar en su carrera o en su salario.

Aun así, quedan residuos de sensaciones sobre no haber hecho lo correcto. Más allá de tus circunstancias actuales o posteriores a haber dejado un trabajo, estas son 5 razones para no arrepentirte de renunciar:

1. No tendrías crecimiento de quedarte

Lo mencionamos hace un momento, una gran razón para no arrepentirse de renunciar es que ya no obtendrías un crecimiento personal ni profesional de quedarte. Muchas personas que renunciaron lo hicieron porque estaban conscientes que un ascenso o incrementar su sueldo en la empresa para la que trabajan no era algo posible que pudiera suceder.

2. No hay oportunidades de aprendizaje

Ampliando la perspectiva, el experto en carreras de LinkedIn, Blair Heitmann, señala que el crecimiento no sólo se refleja de manera vertical en un ascenso o mayor ingreso, también de manera horizontal, como en forma de reconocimiento por las labores, capacitación o medios de expansión de conocimiento e incluso en forma de rotación laboral para adquirir mayor experiencia en otras áreas de la empresa.

Heitmann aseguró que los datos de LinkedIn muestran que los conjuntos de habilidades para los trabajos cambiaron alrededor de un 25% desde 2015. Se espera que este número se duplique para 2027. Como resultado, es absolutamente fundamental que los trabajadores se mantengan actualizados en lo que respecta a su conjunto de habilidades.

3. La rotación en la empresa es alta

No hay que confundir la Gran Renuncia con una ola de despidos. Durante este periodo de pandemia y post-pandemia, muchas empresas padecieron de problemas financieros, por lo que tuvieron que deshacerse de su mano de obra. Ante esto, aquellos que decidieron renunciar posiblemente decidieron lo mejor. Preferible haber tomado la iniciativa, con previa planificación en la búsqueda de nuevas oportunidades laborales, a que un despido te agarre desprevenido.

4. Los valores y la cultura de la empresa no son los tuyos

Usualmente, subestimamos este aspecto, cuando es primordial y la base de muchas frustraciones. Hay que tomar en cuenta que buena parte de nosotros pasamos muchas horas del día en un empleo, por lo que debe ser importante que te sientas identificado con los valores de la empresa. Una buena cultura empresarial proporciona a los profesionales un sentido de pertenencia en su día a día laboral. Si ir a tu trabajo te genera una sensación de pesadez, es posible que no valga la pena regresar ni arrepentirse de haberlo dejado.

5. Es normal sentirse mal por dejar un empleo

Más allá de si es o no la mejor decisión, es común sentirnos mal por dejar un empleo. Hay que tomar en cuenta que todos los argumentos para dejar un empleo son válidos, porque es una decisión personal. Esas razones tuvieron peso en su momento y es posible que esa sensación de certeza se diluya con el tiempo, más si no has encontrado un nuevo trabajo. No desistas, no te desesperes y, sobre todo, no te arrepientas, que por algo tomaste la decisión.

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