Cómo solicitar un préstamo hipotecario si eres extranjero en Estados Unidos

Comprar una vivienda en Estados Unidos puede parecer muy difícil si se consideran los altos costos que reporta el mercado de bienes raíces. Por esa razón, muchas personas recurren a los préstamos hipotecarios que pueden provenir de distintas fuentes: desde los préstamos hipotecarios concedidos por el gobierno federal hasta los préstamos que se tramitan en instituciones financieras y a través de prestamistas privados.

Para los ciudadanos estadounidenses suele ser mucho más fácil, ya que cumplen con los requisitos de ciudadanía y presencia legal que suelen ser necesarios en este tipo de trámites, una ventaja con la cual no cuentan los extranjeros, quienes tienden a creer que es imposible solicitar un préstamo hipotecario en el país y se obligan a pagar altísimas cantidades en efectivo para poder lograr su meta de tener una casa.

No obstante, a pesar de las posibles dificultades asociadas a estos casos, los extranjeros pueden llegar a obtener un préstamo hipotecario para cubrir una parte o casi la totalidad del valor de una propiedad, lo cual les permite incluso arriesgarse con mejores opciones. Todo dependerá de cómo lo tramite el solicitante.

¿Cómo solicitar un préstamo hipotecario en Estados Unidos siendo extranjero?

Aunque muchos extranjeros no lo consideren debido a los requisitos relacionados, los préstamos hipotecarios pueden llegar a ser una excelente alternativa para poder adquirir una casa en Estados Unidos, a pesar de que las opciones se vean más reducidas en estos casos. Básicamente los extranjeros pueden lograr obtener este tipo de préstamos, siempre y cuando provengan de una institución financiera o un prestamista que esté dispuesto a asumir el riesgo relacionado. Aquellos préstamos que estén respaldados por el gobierno federal, conocidos por ser realmente beneficiosos por todas las facilidades que ofrecen, solo están reservados para ciudadanos y extranjeros residentes que puedan dar pruebas de estatus o presencia legal en el país.

En ese sentido, un extranjero que desee solicitar un préstamo hipotecario debe buscar entre las opciones de alto riesgo que ofrece el mercado, principalmente bancos y prestamistas que ofrezcan este tipo de servicios. Esta tarea puede llegar a ser difícil, sobre todo si se considera que la mayoría de las instituciones financieras se niegan a conceder préstamos bajo estas condiciones. No obstante, no es una tarea imposible. El solicitante puede, incluso, contratar los servicios de alguna compañía que sirva de intermediaria, ofreciendo el préstamo a otras que pueden cubrirlo porque disponen de políticas menos rígidas con respecto al riesgo y a la documentación.

Si el extranjero lo logra, la compañía que concederá el préstamo usará canales menos convencionales para poder procesar la solicitud, verificando crédito, ingresos y activos del solicitante a través de otros medios. Esto se debe a que este tipo de solicitudes no cuentan con los requisitos habituales, como un Número de Seguro Social (SSN, por sus siglas en inglés).

¿En qué difieren los préstamos hipotecarios del gobierno de los préstamos otorgados por compañías independientes?

Además de la documentación —que puede llegar a ser diferente y variar de una compañía a otra— los préstamos convencionales y los que son concedidos a extranjeros suelen diferenciarse por otro factor: el costo. La mayoría de los expertos coinciden en el hecho de que estos últimos pueden contar con condiciones diferentes para reducir el riesgo asociado al tipo cliente: desde pagos iniciales mayores (como un 40% del valor total de la propiedad) hasta cuotas mensuales más altas debido a la aplicación de diferentes tasas de interés.

Sin embargo, a pesar de estas diferencias, siguen representando una excelente opción porque financian una gran parte del costo total de la propiedad, aliviando la inversión del solicitante.

¿Cuáles son los requisitos más comunes en la solicitud de un préstamo hipotecario en Estados Unidos siendo extranjero?

Los requisitos, como las condiciones, pueden variar considerablemente entre prestamistas que estén dispuestos a asumir el riesgo de conceder un préstamo hipotecario a un extranjero. No obstante, de acuerdo con Doral Family Journal, existen algunos requisitos que pueden considerarse como básicos y que todo solicitante bajo esta condición debería tener a la mano:

1. Un documento o documentos que sirvan como forma de identificación (pasaporte y/o visa).

2. Documentos que sirvan como pruebas de ingresos (recibos de pago recientes, por ejemplo).

3. Carta de un contador que certifique las finanzas en los últimos dos años.

4. Referencias crediticias o comerciales avaladas por la entidad que las emita.

5. Estados de cuenta bancarios de los últimos meses.

6. Algún documento que sirva como prueba de residencia (recibo de algún servicio público, por ejemplo).

Algunos extranjeros que puedan tramitar un Número de Identificación de Contribuyente Individual (ITIN, por sus siglas en inglés) podrían tener mayor oportunidad de obtener préstamos hipotecarios en Estados Unidos ya que existe una lista de bancos e instituciones financiares en el país que otorgan préstamos a quienes tengan este documento, el cual representa una alternativa al Número de Seguro Social (SSN, por sus siglas en inglés).

En estos últimos casos, también es probable que el prestamista considere el puntaje de crédito del solicitante, el cual debería tener al menos 600, aunque la mayoría de las compañías e instituciones solo se arriesgan cuando el solicitante cuenta con, al menos, 620.

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