Por qué se espera que el mercado de bienes raíces de EE.UU. se hunda aún más en 2023

Investigadores de Goldman Sachs, uno de los grupos estadounidenses de banca de inversión y de servicios financieros más grandes del mundo, publicaron una investigación el pasado martes en la que estimaron una mayor caída del mercado de bienes raíces a lo largo del año 2022, e indicaron que esta industria podría hundirse aún más en el año 2023.

La firma proyectó, para el año 2022, una caída de las ventas de viviendas nuevas de aproximadamente 22%, así como un descenso de las ventas de las casas pre-existentes de 17%.

Por otra parte, para el año 2023, Goldman Sachs estimó una caída de 8% de las ventas de las viviendas nuevas y una bajada de 14% de las ventas de los hogares preexistentes.

Estas estimaciones van acompañadas de una predicción: la de que el incremento de los precios de las viviendas se va a desacelerar hasta llegar a solo un dígito, pues Goldman Sachs espera que los precios de las casas solo se incrementen en 1.8% en el año 2023. De hecho, la firma de inversión bancaria asegura que es posible que en algunas regiones de Estados Unidos bajen los precios de las viviendas, aunque descartó la posibilidad de una caída generalizada de los precios.

Ya en el mes de julio, el mercado inmobiliario había mostrado señales de posible enfriamiento. Las ventas de viviendas previamente habitadas en el mes de julio de 2022 bajaron un 6% en comparación con el mes de junio, de acuerdo información contenida en un reporte mensual elaborado por la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, por sus siglas en inglés). Asimismo, las ventas durante el último mes decayeron en un 20% en comparación a julio del año 2021.

Asimismo, en julio de este año, la compañía especialista en la industria inmobiliaria, Zillow, registró la primera caída de los precios de las casas en venta. Esta es la primera vez que ocurre este fenómeno desde el año 2012.

De acuerdo con el criterio de expertos, este descenso en la industria habitacional podría ser el resultado directo del aumento de las tasas de interés, medidas llevadas a cabo por la Reserva Federal (Fed) para luchar contra los altos índices de inflación en el país, que registró una tasa interanual de 8.5% durante el mes de julio, de acuerdo con la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, por sus siglas en inglés).

Bill McBride, autor del blog especializado de economía Riesgo Calculado, indicó para el portal Fortune que las viviendas eran el objetivo primario la Fed, la cual pretende enfriar la economía disminuyendo la demanda habitacional.

Asimismo, esta caída puede estar relacionada con un cambio en el patrón de vivienda de los estadounidenses, quienes han disminuido la tasa de formación de hogares desde la pandemia, de acuerdo con Goldman Sachs.

De cumplirse la predicción de Goldman Sachs, la recuperación del mercado inmobiliario empezaría en el año 2024, en la que los precios de las casas subirían un 3.5%.

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