La complicada relación del Seguro Social con la población inmigrante en Estados Unidos: quiénes califican para sus beneficios y por qué
Rompemos con los mitos que encierran a los migrantes con y sin documentos en Estados Unidos sobre los beneficios del Seguro Social
“El Seguro Social es el programa gubernamental más exitoso en la historia de nuestra nación”, aseguró el senador Bernie Sanders en su libro Our Revolution en 2016. Y es muy cierto. El Seguro Social ha permitido que millones de estadounidenses tengan un retiro laboral digno y vivan sus siguientes años con la tranquilidad de un pequeño ingreso mensual. Tal vez el beneficio no se compara con un salario, sin embargo, es mejor tener unos cuántos dólares cada mes que no tener nada. Pero existe una discusión permanente, año con año, sobre la elegibilidad de la población inmigrante, sin importar su situación legal en el país.
Sin el Seguro Social, las tasas de pobreza de las personas mayores serían más de cuatro veces más altas que en la actualidad, según un análisis del Centro de Prioridades Presupuestarias y Políticas (CBPP). Además, una encuesta publicada en abril por Gallup mostró que el 89% de los trabajadores jubilados se apoyan en el Seguro Social como una fuente de ingresos mayor o menor. Ambos estudios demuestran su importancia sobre todo en grupos de la sociedad con mayor vulnerabilidad económica, entre los que están los inmigrantes hispanos elegibles.
La polémica sobre los extranjeros beneficiarios del Seguro Social
Según el informe de la Junta de Fideicomisarios del Seguro Social estima que el programa podría agotar completamente sus $2.9 billones de dólares en reservas de activos (es decir, los excedentes de efectivo netos acumulados desde el inicio) para 2035. Una vez que estas reservas se agotaran, el calendario de pagos existente, incluido de ajustes por costo de vida, ya no sería sostenible. Según los Fideicomisarios, puede ser necesario un recorte de hasta un 24% en los beneficios de los trabajadores jubilados para 2035 para mantener solvente al Seguro Social hasta 2094.
Los detractores de la participación de los inmigrantes dentro del programa aseguran que permitirles cobrar los beneficios del Seguro Social, cuando no son ciudadanos estadounidenses, ha provocado que los fondos se agoten. De hecho, son muchas las voces que, pensando que los inmigrantes indocumentados cobran los beneficios del Seguro Social ilegalmente, aseguran que el programa estaría mejor financieramente de no ser por ellos. Es un mito, una afirmación fuera de lugar.
¿Por qué son importantes los inmigrantes para el Seguro Social?
Para sorpresa de muchos de los críticos, son los inmigrantes tan fundamentales como cualquier trabajador estadounidense para el éxito del Seguro Social. Incluso podríamos pensar que un poquito por arriba de los propios ciudadanos, ya que mucha de la fuerza laboral del país depende de los migrantes, legales o indocumentados, que entran a territorio norteamericano.
Por si fuera poco, The Motley Fool considera que la inmigración con documentos a los Estados Unidos es vital para la salud del programa del Seguro Social. “No es útil. No es una buena ventaja. ¡Vital!”.
Tal como lo señala la publicación, el programa del Seguro Social depende de que los nuevos trabajadores que ingresen a la fuerza laboral superen el número de trabajadores que se jubilan y reclaman beneficios. Esto se da con mayor fuerza y tranquilidad para la existencia del programa, dado que la mayoría de los inmigrantes legales en los EE.UU. son jóvenes, y suelen pasar décadas trabajando y aportando al Seguro Social a través del impuesto sobre la nómina.
De acuerdo con el informe de 2020 de la Junta de Fideicomisarios, el modelo de costo intermedio (es decir, el modelo que se considera más probable que suceda) asume un promedio de 1,261,000 inmigrantes netos totales que ingresarán a los EE. UU. cada año entre 2020 y 2094. Si Estados Unidos promediara un número menor de inmigrantes legales netos en el país, el ya monstruoso déficit de fondos estimado del programa de $16.8 billones dólares durante los próximos 75 años aumentaría aún más. De ahí su importancia la inmigración legal al país.
¿Qué papel juegan los trabajadores indocumentados?
Aunque parezca sorprendente, los trabajadores indocumentados son muy importantes para la subsistencia del Seguro Social, a pesar de que no califican para recibir sus beneficios.
Es un mito de que los inmigrantes indocumentados son la causa del mal del Seguro Social, cuando no reciben ningún centavo de dólar de cualquiera de los beneficios del programa. Como se ha dicho, los únicos que pueden calificar en todo caso son los migrantes o residentes legales.
Buena parte de la confusión que ha alimentado al mito y a sus críticos es que las personas mayores de bajos ingresos, discapacitadas, legalmente ciegos o solicitantes de asilo pueden calificar para un beneficio mensual del Ingreso de Seguridad Suplementaria (SSI), que no es lo mismo que el Seguro Social. Si bien la Administración del Seguro Social supervisa el SSI y el Seguro Social, tienen fuentes de financiación completamente diferentes. Un no ciudadano que recibe un pago de SSI no es lo mismo que una persona que recibe el beneficio del Seguro Social.
Por si fuera poco, los trabajadores indocumentados sí fortalecen el programa del Seguro Social. Según un análisis de la Oficina de la Actuaria del Seguro Social, en abril de 2013 estimó que los trabajadores indocumentados y sus empleadores contribuyeron hasta $13 mil millones de dólares en ingresos de impuestos sobre la nómina al programa durante el año fiscal 2010. En muchos casos, los inmigrantes indocumentados están usando un número de seguro social falso o el número de seguro social de un amigo para ser contratados por un empleador, que es lo que lleva a la recaudación de impuestos sobre la nómina, a pesar de que jamás recibirán el beneficio (a menos de que se establezcan como legales posteriormente y adquieran su propio número de Seguro Social).
En conclusión, no importa si eres inmigrante con o sin documentos en Estados Unidos, eso no afecta los fondos del Seguro Social. Al contrario, todos aportan de alguna manera a su existencia y son parte importante de la fuerza laboral del país que mantiene el programa y los beneficios que de éste se derivan.