Crédito de Oportunidad Estadounidense: quiénes califican para obtener hasta $2,500 dólares
El Crédito Fiscal de Oportunidad Estadounidense (AOTC) ayuda a las familias a que cada vez más jóvenes puedan estudiar la universidad con un reembolso de impuestos que puede llegar hasta los $2,500 dólares
El Crédito Fiscal de Oportunidad Estadounidense (AOTC) no es de los más populares, pero sí de los que más dinero te pueden dar cada año. Crédito: Shutterstock
Para buena parte de las familias estadounidenses, resulta ser un sacrificio financiero cuando un joven decide continuar su preparación académica e ir a la universidad. El Crédito Fiscal de Oportunidad Estadounidense (AOTC) permite que los hogares puedan recibir un apoyo tributario de hasta $2,500 dólares por año por cada estudiante calificado.
El Crédito Fiscal de Oportunidad Estadounidense (AOTC) no es tan popular como otros créditos, como el Crédito Tributario por Hijos, pero brinda una gran ayuda financiera cada año para aquellos hogares que tienen estudiantes universitarios. Este crédito se puede aplicar a gastos esenciales como matrícula, cuotas de inscripción y materiales del curso.
Como cualquier otro apoyo tributario, el Servicio de Impuestos Internos (IRS) tiene una serie de requisitos para que los contribuyentes puedan calificar al AOTC.
Como primer criterio, se permite reclamar un crédito educativo por estudiante por año. Eso significa que sólo un contribuyente, sea uno de los padres de familia o la persona en sí misma, puede reclamar al estudiante en cuestión para recibir la ayuda financiera.
Asimismo, para recibir el AOTC, los ingresos deben ser inferiores a $180,000 dólares cuando presentan una declaración conjunta o $90,000 dólares si es soltero, cabeza de familia o viudo calificado. Este crédito se reduce gradualmente para aquellos con ingresos entre $80,000 y $90,000 dólares o entre $160,000 y $180,000 dólares para declarantes conjuntos.
El AOTC está disponible para los primeros cuatro años de educación post-secundaria. El estudiante debe estar siguiendo un programa que conduzca a un título o una credencial educativa reconocida. También deben haber estado inscritos al menos la mitad del tiempo durante el año fiscal y no haber sido condenados por un delito grave por posesión o distribución de una sustancia controlada.
Puedes reclamar el crédito por “gastos de educación calificados”, que incluyen la matrícula pagada a colegios, universidades, escuelas vocacionales u otras instituciones educativas posteriores a la escuela secundaria públicas, sin fines de lucro o privadas acreditadas. También cuentan las tarifas de inscripción y los materiales necesarios para los cursos.
Para que todos estos gastos califiquen, la institución debe participar en un programa de ayuda estudiantil con el Departamento de Educación de EE.UU.
Además de todos estos requisitos, es preciso señalar que lo que puedes recibir de AOTC es considerablemente variable, por su forma de cálculo.
¿Cómo se determina la cantidad de tu Crédito Fiscal de Oportunidad Estadounidense?
Aunque todos los gastos educativos de un universitario pueden considerarse dentro del AOTC, la manera de recibir la máxima cantidad disponible de $2,500 dólares por estudiante por año no es con base en tus gastos totales, debido a su manera de calcular.
Los primeros $2,000 dólares de gastos educativos pagados por cada estudiante elegible podrán recibir el 100% de esa cantidad.
El AOTC dará un 25% adicional de los siguientes $2,000 dólares de gastos educativos calificados por estudiante. En otras palabras, para recibir $2,500 dólares de este crédito, el reclamante deberá haber tenido por lo menos $4,000 dólares en gastos educativos anuales.
Por ejemplo, si tienes gastos calificados de $3,000 dólares, reclamarías el 100% de los primeros $2,000 (es decir, un crédito de $2,000 dólares) y el 25% de los $1,000 dólares restantes (se sumarían $250 dólares al beneficio fiscal). Tu crédito total sería de $2,250 dólares.
La asistencia educativa libre de impuestos, como becas y asistencia educativa proporcionada por el empleador, debe deducirse de tus gastos educativos totales antes de calcular el crédito.
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