Cupones SNAP: cómo aumentar tus beneficios deduciendo tus gastos médicos

Todos los hogares con personas adultas mayores de 60 años o discapacitadas tienen la posibilidad de reducir los gastos médicos para obtener cupones de alimentos SNAP más grandes: solo el 12% de los hogares elegibles lo hace

Gastos médicos para cupones SNAP

Los cupones SNAP te permiten restar parte de tus gastos médicos y recibir más dinero para tus alimentos. Crédito: Shutterstock

Sabemos que buena parte de las personas mayores de 60 años sufren para llegar a fin de mes. Algunos tienen la oportunidad de recibir los beneficios del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP). Lamentablemente, sus gastos pueden superar fácilmente su presupuesto. Lo que pocos saben es que cuando esos gastos son médicos, podrían tener la posibilidad de recuperar algo de dinero de sus cupones de alimentos.

El Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) permite a los hogares deducir de sus ingresos los gastos médicos no reembolsados ​​superiores a $35 dólares por mes al calcular su ingreso neto para propósitos de SNAP para reflejar de manera más realista los ingresos que tienen disponibles para comprar alimentos. Esto, a su vez, podría potencialmente calificarlos para recibir mayores beneficios de SNAP.

Por desgracia, solo alrededor del 12% de los hogares con miembros ancianos o discapacitados elegibles lo reclaman, según el Centro de Prioridades Presupuestarias y Políticas (CBPP).

La deducción de gastos médicos puede tener un impacto significativo en los beneficios de SNAP. Para una persona mayor típica que vive sola, reclamar entre $50 y $200 dólares en gastos médicos puede resultar en $7 a $69 dólares adicionales en beneficios SNAP al mes.

Informar los gastos médicos en el proceso de solicitud de SNAP es esencial, ya que eso significa que puedes calificar para un pago mucho más grande cada mes destinado a tus alimentos.

Entre los gastos médicos que califican a la hora de deducirlos en tus ingresos para calificar a SNAP se encuentran:

  • Primas de seguro médico, incluido Medicare
  • Suministros y equipos médicos, como anteojos, dentaduras postizas, audífonos y prótesis.
  • Medicamentos recetados y medicamentos de venta libre
  • Porción no reembolsada de hospitalización, tratamiento ambulatorio, tratamiento comunitario o atención en un asilo de ancianos
  • Facturas médicas impagas
  • Costo razonable de transporte y alojamiento para el tratamiento.
  • Costo de un asistente de cuidado personal, asistente de atención médica domiciliaria, asistente de enfermería certificado, enfermera visitante u otro asistente o ama de llaves que sea necesario debido a la edad o enfermedad.
  • Gastos de reducción de gastos incurridos por los beneficiarios de Medicaid
  • Costo de conseguir y mantener un perro guía, auditivo o de servicio

Las facturas médicas de suma global más grandes deben dividirse por la cantidad de meses que un hogar está certificado para recibir SNAP para calcular el costo mensual.

Las reglas federales de SNAP requieren verificación de gastos médicos. Los estados tienen flexibilidad sobre cómo cumplir con este requisito, y algunas prácticas estatales crean obstáculos que pueden disuadir a los hogares elegibles de reclamar los gastos completos

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