Las dos formas en las que puedes dejar de cobrar el Seguro Social y por qué te convendría

Hay algunas razones por las cuales valdría la pena detener los pagos del Seguro Social, que te beneficiarían en recibir más dinero en el futuro o por lo menos no dejar dólares en el camino

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Aunque parezca descabellado, renunciar a los pagos del Seguro Social podrían darte más dinero en el futuro. Crédito: Shutterstock

Podría asegurar que a un 99% de nuestros lectores en SoloDinero que reciben beneficios de jubilación del Seguro Social jamás les pasaría por la cabeza dejar de cobrarlos, sin embargo, hay situaciones de vida, que quizás lo conozca ese 1% restante, en las que te convendría detener los pagos para recibir más dinero en el futuro.

El Seguro Social proporciona el 50% o más de los ingresos de jubilación para el 37% de los hombres y el 42% de las mujeres, según la Administración del Seguro Social (SSA). La idea misma de detener los beneficios parecería una locura, pero lo que pocos saben es que eso podría darles más dinero.

Hay dos razones en especial por las cuales valdría la pena detener los pagos del Seguro Social:

  1. Si decides seguir trabajando, no has alcanzado la edad plena de jubilación y ganas más de $21,240 dólares en 2023, tus beneficios se reducirían en $1 dólar por cada $2 dólares que ganes por encima de ese límite.
  2. Si estás en la misma situación de seguir trabajando, es posible que tus beneficios del Seguro Social estén sujetos a impuestos.

Si declaras impuestos como individuo, puedes pagar impuestos sobre el 50% de tus beneficios si ganas al menos $25,000 dólares, o el 85% de tus beneficios si ganas más de $34,000 dólares. Para contribuyentes conjuntos, esos límites de ingresos son $32,000 y $44,000 dólares, respectivamente.

Si desea evitar tanto la tributación como la reducción temporal de tus beneficios, puedes suspender o retirar tu solicitud de Seguro Social.

¿Cómo detener los pagos del Seguro Social?

La primera forma en la que puedes dejar de cobrar el Seguro Social es solicitando la suspensión de tus beneficios. Esto significa que optas por no recibir los pagos mensuales del Seguro Social durante un período de tiempo determinado.

Esta opción puede ser especialmente atractiva si sigues trabajando después de alcanzar la edad de jubilación completa, ya que puedes aumentar tu beneficio mensual futuro al posponer los pagos.

La suspensión de los pagos también puede ser beneficiosa si tienes una expectativa de vida más larga o si tienes otras fuentes de ingresos que te permiten prescindir de los pagos del Seguro Social en ese momento. Al suspender los beneficios, tus pagos mensuales se incrementarán en un 8% por cada año que pospongas hasta los 70 años. Esta opción te brinda la posibilidad de aumentar significativamente tu ingreso mensual en el futuro.

La segunda forma en que puedes dejar de cobrar el Seguro Social es solicitando la terminación de tus beneficios. Esto implica renunciar por completo a los pagos futuros y ya no recibirás ningún beneficio del Seguro Social. Esta opción puede ser adecuada si has decidido regresar al trabajo y no necesitas el ingreso adicional de la Seguridad Social, o si tienes otras fuentes de ingresos que cubren tus necesidades financieras.

Es casi seguro que nadie optaría por esta última opción, pero este tipo de decisiones permitirían que las personas que más lo necesitan en el futuro puedan contar con él, sin el temor de los pronósticos de que el Seguro Social podría terminar antes del 2035.

Es importante tener en cuenta que una vez que hayas tomado la decisión de terminar tus beneficios, no podrás revertir esta elección en el futuro. Además, si tomas la decisión de volver a solicitar los beneficios más adelante, se te aplicarán los ajustes correspondientes según tu edad en ese momento.

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