Qué pasa cuando eres auditado y cómo te avisa el IRS que te tiene bajo la lupa

Aunque las posibilidades sean remotas, la mayoría de los contribuyentes tienen miedo de ser auditados: ya sea porque temen haber llenado mal los formularios de impuestos, porque enviaron sus declaraciones con errores o por el simple hecho de que sus ingresos presentados no son los reales.

La realidad es que puede haber muchos motivos por los que el Internal Revenue Service (IRS) puede pedir que se haga una auditoría fiscal o que, sus agentes monitoreen los documentos de determinado contribuyente.

Lo cierto es que la mayoría de las auditorías comienzan con una carta del Servicio de Rentas Internas, en donde te avisa que tu declaración de impuestos y tu como contribuyente estás entrando en un proceso para ser auditado.

Las razones pueden ser desde que las autoridades fiscales dieron la orden, desde que fuiste seleccionado al azar por el Servicio de Impuestos Interno (IRS, en su traducción al español), cuando alguna empresa o pagador reporta el formulario 1099 (en el que se demuestran los ingresos recibidos por algún proyecto) pero la persona no reportó el ingreso en su declaración de impuestos.

Lee: Errores comunes que pueden derivar en una auditoría fiscal

Lo cierto es que no tengas la menor duda de que el Internal Revenue Service va a identificar el problema y va a llamarte para aclararlo.

No lo harán por teléfono, ni por un correo electrónico, te llegará un aviso formal del IRS. En esta carta te darán la información de contacto y las instrucciones y pasos a seguir.

Una vez recibida, entonces es momento de que empieces a reunir toda la documentación que te ayude a defender tu caso. Los expertos fiscales recomiendan enviar documentación clara y concisa con una explicación simple, sin mayor problema.

Los especialistas coinciden en que muchas de las veces el problema se acaba aquí, sin embargo, hay ocasiones en que las autoridades fiscales necesitan más, por lo que piden una reunión cara a cara.

En este caso, la mayoría de los contribuyentes se sienten más cómodos enviando a un profesional de los impuestos que los represente.

Las entrevistas suelen realizarse en una oficina del Internal Revenue Service o, en su defecto, en la casa del contribuyente en cuestión. También puede ser en el negocio del declarante o en la oficina de tu especialista fiscal.

Lee: Cómo salir bien librado de una auditoría fiscal

Dependiendo de cuál haya sido la instrucción recibida, debes de asegurarte de que el Servicio de Rentas Internas haya recibido respuesta de tu parte, así que pídeles una confirmación.

Por ejemplo, si usas el Servicio de Correos Estadounidense, puedes pedir uno de sus servicios adicionales para asegurarte que reciban confirmación de la entrega.

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