Buenas, malas (y peores) noticias para los conductores y compradores de autos en Estados Unidos en 2022
Tras 2 años de consecuencias negativas en todos los aspectos de la vida debido a la pandemia del COVID-19, el panorama del 2022 para los conductores de autos en Estados Unidos no brinda muchas esperanzas de mejora, sobre todo para los que están en el mercado para comprar un vehículo nuevo o usado.
Los reportes anuales sobre el costo de tener, operar y mantener un auto en Estados Unidos ahora incluyen la cantidad de concesionarios de autos nuevos y usados, ante la crisis creada por el exceso de demanda y la baja cantidad de inventario creada en parte como consecuencia de más de dos años de la pandemia del COVID-19.
La tormenta perfecta de la industria automotriz que se acentúo con la escasez de microchips no parece tener pronóstico de mejora a corto plazo, por lo que las palabras clave para los consumidores que necesitan comprar un auto nuevo o usado en 2022 son paciencia y más paciencia.
Atrás quedaron los días en que se podía ir a un concesionario para negociar el precio sugerido por el fabricante (Manufacturer´s Suggested Retail Price, MSRP) y salir con un descuento.
Hoy no es raro ver precios inflados en más del 50%, sobre todo en modelos que los consumidores han estado esperando por años, como la nueva familia del Ford Bronco -ganador del Premio SUV 2022 del Año en Norteamérica-, y menos raro comprobar que hay muchos dispuestos a pagar cualquier precio, sin ningún tipo de regateo.
De hecho, el mercado de los autos nuevos de lujo aumentó en un 2.4% en 2021, hasta 17.4% de todo el mercado, con precio promedio de $61,455 dólares.
Todo esto ha provocado que los precios los autos nuevos en general se hayan disparado a niveles récord desde fines de la primavera pasada, hasta superar los $47,000 dólares a finales de 2021, $6,220 dólares más que en 2020.
Estos precios récord han llevado a muchos posibles compradores de autos nuevos al mercado de los usados, pero la misma escasez de inventario ha elevado estos precios incluso más rápido, por lo que ahora el precio promedio de un auto usado es de $27,569 dólares, un aumento sin precedentes de 13% con respecto al año pasado y 41 % más que en noviembre de 2019, solo un mes antes de que se detectara por primera vez el COVID-19.
Consejos para sobrevivir la crisis
Así que sin señales de alivio a la vista en un mercado tan difícil para quienes necesitan un automóvil, estos son los consejos para navegar la crisis:
Paciencia – Tu nivel de urgencia para comprar ese auto, SUV o camioneta es la misma de miles de otros consumidores, así que hay que entender esa realidad y ajustarse a esta nueva realidad. Para obtener mejores resultados en tu búsqueda, utiliza las herramientas y servicios disponibles en internet, en lugar de visitar un concesionario. Solo cuando tengas la información básica de lo que buscas, programa una cita en persona.
Amplía tu búsqueda – Si tienes solo un modelo en mente, limitarás tus posibilidades de encontrarlo. Así que deberías ampliar los límites de tu búsqueda, no solo en cuanto al modelo en cuestión, sino a un área geográfica más amplia. Quizá tengas que viajar algunos cientos de millas para encontrar lo que necesitas, pero el esfuerzo vale la pena.
Entiende los tiempos – Si te decidiste por un auto nuevo, prepárate para esperar la fecha de entrega. La nueva realidad del mercado es que tras ordenar un auto nuevo, lo más probable es que tengas que esperar varias semanas o meses para recibirlo. Por lo tanto, es importante planear la transacción con suficiente anticipación.
Paciencia (parte II) – Si la compra de un auto nuevo incluye el intercambio (trade-in) de tu auto usado, compara tu vehículo con la misma agresividad con la que buscas el nuevo. No aceptes la primera oferta, porque podrías encontrar algo mejor, aunque tampoco deberías esperar demasiado porque corres el riesgo de perder por las dos partes.
Paciencia (parte III) – Si es posible, quizá es mejor mantener tu auto por otro año. Lo más probable es que para 2023 los factores negativos de la actualidad se hayan disipado y la cantidad de inventario se nivele con la demanda, con lo que se estabilizarán los precios. Esta opción solo es válida si tu auto actual esté en condiciones óptimas de operaciones y no necesite reparaciones urgentes y/o costosas.
A más precio, más opciones – Quizá este dato sea demasiado obvio, pero los autos usados con precio inferior a los $10,000 dólares siguen siendo los más escasos, lo que mejora levemente en el rango de los $10,000 dólares a los $15,000 y en mayor nivel entre los que cuestan más de $25,000 dólares.
Las (pocas) buenas noticias
Si ya superaste los obstáculos y lograste comprar un auto nuevo, te causará alivio saber que los estudios de calidad muestran repetidamente que las nuevas generaciones de vehículos sufren menos problemas en comparación con los producidos apenas hace pocos años. Gracias a estos avances, la edad promedio del vehículo en las carreteras estadounidenses es de más de 12 años.
Además, la mayoría de las marcas ahora ofrecen más y mejor tecnología con opciones como el control de crucero adaptativo, Apple CarPlay y Android Auto, que cada vez son más comunes que nunca en los vehículos de nivel de entrada.
Y si ya estás manejando, es bueno saber que debido a las limitaciones de movimiento a consecuencia de la pandemia, el promedio de horas perdidas en el tráfico en Estados Unidos en 2021 bajó 63 horas en comparación con los niveles pre-pandemia, lo que resultó en pérdidas de “solo” $564 dólares y 36 horas por conductor.