Cómo reducir los gastos laborales de tus impuestos

Pensar en cómo podemos pagar menos impuestos siempre será una búsqueda constante entre los contribuyentes. Aunque existen varias maneras de demostrarle al IRS (Internal Revenue Service) el por qué debemos de presentar menos ingresos o incluso, por qué merecemos un reembolso a la hora de hacer las declaraciones,  actualmente puedes reclamar tus gastos laborales.

Cuando hablamos de gastos laborales nos referimos a las deducciones que pueden hacer las personas que están trabajando desde su casa. Con la actual pandemia del coronavirus, esta opción se ha abierto a muchos empleados con el fin de detener la rápida propagación del Covid-19.

Pero no solo los empleados que hacen home office pueden aplicar para estas deducciones, también lo pueden hacer aquéllos que son independientes.

Cómo reclamar los gastos laborales

Un artículo publicado por CNTE explica que se pueden hacer deducciones estándar y deducciones detalladas. Las primeras son tarifas planas que lo abarcan todo, sin hacer preguntas extras. Para el año fiscal 2020, la tasa fija es de $ 12,400 para contribuyentes solteros y casados ​​que presentan declaraciones por separado. La tasa es de $ 24,800 para casados ​​que presentan una declaración conjunta.

En cambio, las deducciones detalladas te servirán para reclamar los gastos de trabajo, los pagos médicos, las donaciones, entro otros. A diferencia de la primera ésta requiere de un mayor tiempo y necesitas mostrar comprobantes de todo aquello que estás reduciendo.

¿Qué tipo de gastos puedes reclamar?

Una de las primeras cosas son los gastos que te conlleven a montar una oficina desde tu casa, el hecho de que tengas un espacio reservado y de uso exclusivo para ello, te ayuda en las deducciones. Asimismo puedes deducir una parte del seguro de tu casa, servicios públicos como la electricidad y el gas y también el simple hecho de que tu casa se deprecie por el gasto extra que le das.

Y la idea es que todo sea deducible de acuerdo a los porcentajes que estés destinando para trabajar en tu casa.

Otro de los elementos comunes que suelen servir para este tipo de deducciones son los viajes y los gastos que estos conlleven. Aquí entran los vuelos, el hotel, comidas foráneas, etcétera.

El uniforme y el aprendizaje y la preparación continua también son deducibles. Por ejemplo los costos de inscripción, los pagos de mensualidades, los gastos por materiales, etc. También son deducibles las membresías a colegios, y los maestros pueden aplicar también para las deducciones.

Finalmente, están los suministros.

“Los propietarios de negocios autónomos pueden deducir hasta $ 1,020,000 por equipos comerciales calificados como computadoras, impresoras y muebles de oficina”, dijo Lisa Greene-Lewis, contadora pública y experta en impuestos de TurboTax a CNTE.

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