El miedo puede hacer que tomes mejores decisiones financieras durante una crisis económica, ve porqué
Haz de esta sensación de angustia tu aliada
Es evidente para muchas personas en Estados Unidos y en el mundo que la pandemia de coronavirus vino a ponernos a prueba en diversos rubros: salud, economía y fortaleza mental. Lo primordial es cuidarnos de la enfermedad. Los mexicanos suelen decir: “si tienes salud, puedes tener lo demás”. Y es muy cierto. Pero para cuestiones de dinero, ahorro e inversión, es posible que tus emociones de miedo se exacerben con mayor facilidad. Y aunque pareciera todo lo contrario, ese sentimiento de angustia es natural, pero ¿sabías que podría provocar que tomes mejores decisiones financieras durante una crisis económica?
Para empezar, es importante resaltar que, hablando en términos de inversión y ahorro, los mercados y el propio gobierno actuaron de manera rápida contra el COVID-19 en sus respectivas trincheras.
El mercado de valores tuvo una recuperación relativamente rápida para el fuerte impacto que recibió. El 19 de febrero de 2020 tuvo una caída masiva de su máximo histórico, del que se recuperó en tan sólo 148 días, teniendo un funcionamiento relativamente cotidiano desde entonces. Aunque parezca mucho tiempo, para el grado de recesión que se percibe en el ambiente, créanlo, es definitivamente rápido.
Por su parte, el Sistema de la Reserva Federal (FED) fue veloz en resolver el problema en el que empresas y millones de personas hubieran caído de no accionar pronto. Su decisión de bajar la tasa de referencia al 0% ayudó bastante a los mercados a estabilizarse más rápido de lo que se pensaba que podría ser. Este movimiento generó más certidumbre para compañías y clientes.
De acuerdo con un USA Today, podríamos estar experimentando una recuperación en “forma de K”. Eso significa que determinadas industrias se recuperarán con bastante rapidez, mientras otras seguirán luchando, sino es que disminuyen aún más. “Aquellos de nosotros que no experimentamos una caída financiera no tendremos que cavar de un hoyo en el que no estamos. Mientras que aquellos de nosotros que hemos experimentado alguna adversidad financiera debemos reconstruir lo que se perdió”, concluye.
Y si todas estas noticias no te brindan confianza, te angustian y espantas por el panorama aquí señalado, tenemos un dato: estos sentimientos de miedo podrían hacerte tomar las mejores decisiones en cuanto a tus finanzas personales.
El miedo como agente de la acción
Como buenos animales que somos, el miedo es uno de nuestros grandes motores, y en las finanzas no podría ser lo contrario. El miedo y la codicia mueven nuestras vidas y nuestro dinero. El instinto de supervivencia del miedo hace que cualquier presa de las circunstancias escape de su voraz depredador, emprendiendo el escape tan pronto como pueda.
Así como los animales, cuando todo esta “normal”, tendemos a aflojar nuestra cartera y acumulamos cosas materiales. Pero cuando hay signos de que la economía global no va bien, como ahora, y nos asustamos por ello, somos más conscientes de las realidades de nuestro bolsillo y nuestras verdaderas necesidades y prioridades.
Pero si el miedo te paraliza, como aquella presa que se queda impávida mientras observa como su victimario muestra sus colmillos para devorarlo, te quedas sin acción, entonces, al contrario, podrías empeorar tu situación financiera. Aunque si ese “no movimiento” significa una estrategia para gastar menos y ahorrar más, entonces, adelante, que te rinda frutos.
Lo que debes tener presente cuando sientas miedo, que todos los seres humanos lo tenemos y más en circunstancias como las actuales, es que debes aceptarlo, estar consciente de cuál es la fuente de tu miedo y accionar en correspondencia a ello.