¿Es buena idea vender tu casa en 2021? Descubre si deberías o no hacerlo
Hay perspectivas que brindan la seguridad de vender, pero otros puntos importantes para no hacerlo
El mercado inmobiliario no fue ajeno a las circunstancias provocadas por la pandemia de coronavirus y muchas de las ofertas en bienes raíces no encontraron cauce durante este año. A pesar de que la enfermedad continúa activa en el mundo, la creación y próxima distribución de una vacuna contra el COVID-19 podría ayudar a que la gran mayoría de las industrias reanuden sus actividades paulatinamente. En este sentido, si no pudiste vender tu casa, es posible que el 2021 tome un rumbo distinto. Descubre si te conviene o no hacerlo.
De acuerdo con expertos en el mercado de la vivienda de U.S. News, 2021 podría ser un año de alta demanda y aumento de los precios de las viviendas. Sin embargo, si tomar la decisión de vender una casa no es sencilla, menos cuando no se sabe cuál será el panorama en el mercado inmobiliario. Por ello te damos tres perspectivas de porqué deberías aprovechar para vender el próximo año o porqué deberías esperarte.
Vender tu casa en 2021
Tal como se ven en los últimos registros de Freddie Mac del 10 de diciembre, las tasas de interés se encuentran en mínimos históricos del 2.71% para una hipoteca de tasa fija a 30 años. Incluso desde antes de la pandemia ya se pronosticaban bajas tasas de interés. Esto podría ser un factor doblemente favorable para los vendedores: por un lado, hace más llamativas las necesidades de comprar una casa y, por otro, es posible que ante la poca oferta de viviendas, las propiedades aumenten de precio.
Pero obtener ganancias no debe ser tu único criterio. Recuerda que la poca oferta de viviendas también podría afectarte, más si estamos hablando de que la casa que pretendes vender es la única que tienes y quieres ponerla en el mercado en busca de mudarte a otro lugar. También el alza de los precios de las propiedades podrían condicionar que ni aun vendiendo tu casa encuentres otra de similar estructura a un precio más asequible.
También existe la posibilidad de que necesites vender, por ejemplo, por la pérdida de empleo y el temor de retrasarte en tu pago de hipoteca. Sin embargo, vender bajo necesidad puede influir en tu toma de decisiones, incluso en que vendas barato por la presión del tiempo.
Esperar y no vender en 2021
Uno de los mayores movimientos que se dieron en el sector inmobiliario fue el refinanciamiento de las hipotecas. Luego de que la Reserva Federal redujera los índices de referencia, los prestamistas bajaron sus tasas de interés. Muchas de las personas que ya tenían una hipoteca y no tenían muchos años con su hipoteca decidieron refinanciar. Entonces, bajo esa lógica, no tiene mucho caso vender el próximo año.
Como lo mencionamos, vender bajo presión puede no ser una gran idea. Puedes malbaratar tu vivienda por la necesidad de ingreso. El dinero se acaba rápido y podrías quedarte sin ingresos ni casa. Si temes retrasarte en los pagos de tu hipoteca, actualmente los prestamistas están generando planes que se adecuan a tus necesidades financieras actuales.
Según U.S. News, esperar un mercado más equilibrado es una buena idea para algunos propietarios y es poco probable que obstaculice su capacidad de obtener un buen precio por la casa que vende. En un mercado donde la oferta y la demanda están más equilibradas, es menos probable que veas múltiples ofertas y precios muy por encima del precio de venta regular en el mercado, pero aún verías un crecimiento positivo del valor de la vivienda.