La inflación en EE.UU. llegó a 9.1% el último año y la recesión parece estar más cerca: qué hacer hoy con tu dinero para no perder

Malas noticias: la inflación en Estados Unidos está por las nubes; y lo peor: la recesión está más cerca.

Luego de se diera a conocer el informe de índice de precios al consumidor (CPI) de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS), en el que se señala que la inflación aumentó a 9.1% interanual en junio, las alarmas siguen en focos rojos en todo el país. Desde que comenzó el año, especialistas han analizado las circunstancias económicas que han provocado que nos encontremos en este punto, con cifras inflacionarias que no se veían en cuatro décadas, y casi de manera unánime, han concluido que nos acercamos a una irremediable recesión.

A mediados de junio, la Reserva Federal aumentó las tasas de interés de referencia a 0.75% para contener los precios y el consumo. Como vimos con el informe de la BLS, eso no sucedió. De ahí que, en las últimas semanas, los funcionarios de la Fed han reforzado la idea de que las medidas antiinflacionarias serían más fuertes y, con ello, aumentarían las probabilidades de que la economía del país se detenga.

Es cierto que en términos macroeconómicos no hay nada que puedas hacer: si los cheques de estímulo y el aún fuerte mercado laboral provocaron la inflación o si las medidas del banco central nos llevarían a una recesión, ninguna de estas razones están en tus manos. Lo que sí está en ti, son las acciones preventivas que debes realizar hoy mismo por si la economía del país se detiene.

1. Trabaja ya

Si tienes un trabajo, tienes que esforzarte por mantenerlo; pero si no tienes uno, debes conseguirlo ya. Las últimas cifras sobre la oferta de trabajo muestra que hay un mercado laboral fuerte y estable (aún). Se agregaron 372,000 nuevos empleos en junio y las solicitudes de desempleo siguen siendo bajas. El problema es que si la inflación continúa y las tasas de interés aumentan, las compañías tendrán que parar la contratación y, muy posiblemente, comiencen a haber despidos.

De hecho, aun cuando te sientas estable en tu trabajo, te recomendamos que busques nuevas oportunidades, que te dejen mayores ganancias o más estabilidad laboral. En pocas palabras, mantén un empleo confiable y hazte visible para tus jefes.

2. Ahorra más

Ahorita que te sientes financieramente estable, con un empleo que te genere ingresos regulares, deberías aumentar tus ahorros y crear un fondo de emergencia, si aún no lo has hecho. Podrías pensar que no te alcanza para ahorrar, pero no sabes lo que dices. De acuerdo con la experiencia y la historia de EE.UU., aun cuando no pierdas tu trabajo durante una recesión, es muy posible que tus ingresos se reduzcan: salarios más bajos, eliminación de horas extras, bonos y comisiones.

Para ahorrar más, debes gastar menos. Es momento de que recortes gastos no esenciales. Incluso en tus compras necesarias, como alimentos y suministros, puedes optar por marcas más baratas desde ahora para incrementar tu fondo de emergencia. Estas acciones te servirán de entrenamiento si entramos en recesión.

3. No temas

El miedo es uno de los peores sentimientos que puedes sentir, y más si no lo controlas, porque podría llevarte a tomar decisiones impulsivas y poco acertadas. En un primer aspecto, no te limites en disfrutar la vida. Sí, todo cuesta; pero las salidas al parque de vez en cuando, jugar con tus hijos en el patio, tomar un respiro en la ventana pueden ayudarte a relajar ante las preocupaciones financieras y sin gastar. Sé creativo.

Y en torno a tu dinero, recuerda que los fondos que tengas en los bancos están protegidos durante una recesión. A lo que vamos, es que no debes temer perder tu efectivo en las instituciones financieras más importantes de EE.UU. y que eso te lleve a sumarte a corridas bancarias, mismas que son más peligrosas que la recesión, porque sí podrían provocar que un banco quiebre.

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