Qué es el impuesto mínimo corporativo aprobado por el G20 y si Estados Unidos lo aplicará
El impuesto mínimo corporativo aprobado por el G20 buscaría recaudar $150,000 millones de dólares adicionales al año; Estados Unidos ya ha hecho sus intentos por aprobar su reforma impositiva sin éxito
Durante el evento del Grupo de los 20 (G-20) en su cumbre en Roma, los líderes de las 20 economías más desarrolladas del mundo aprobaron, con amplio apoyo, un impuesto corporativo mínimo global, luego de varios meses de negociaciones. Ahora sólo falta saber si Estados Unidos, como las demás naciones, podrán aplicar esta reglamentación.
El impuesto corporativo mínimo global señala que cada empresa debe pagar un 15% sobre sus ganancias en impuestos al país en el que opera, si se beneficia de tasas inferiores en otra nación. El objetivo es evitar que las compañías evadan impuestos a través de los conocidos paraísos fiscales. Esta imposición fiscal global sólo se aplicaría a empresas con más de $850 millones de dólares en ingresos anuales.
Las grandes compañías suelen depositar sus ganancias en cuentas bancarias en el extranjero, en países que les ofrecen pocos o nulos pagos de impuestos, y así atraer dinero que de otra manera no tendrían. La reforma impositiva global del G20 busca rescatar la recaudación de algunos gobiernos para que tengan la capacidad de invertir en sectores sociales.
Con la imposición de esta nueva tasa mínima se espera recaudar $150,000 millones de dólares adicionales cada año en todo el mundo, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el espacio dentro del cual se negoció el acuerdo.
¿Cómo se aplicará el impuesto mínimo global y si Estados Unidos lo hará?
Casi 140 países, que representan más del 90% de la producción económica mundial total, han respaldado el acuerdo. El G20 planea poner en marcha el impuesto para 2023, sin embargo cada país es responsable de ejecutarlo por su cuenta, por lo que si Estados Unidos se piensa alinear a esta disposición, dependerá de la administración de Joe Biden y el Congreso sancionar la legislación correspondiente. No es tarea fácil.
Actualmente, el Senado de Estados Unidos está dividido en 50 republicanos y 50 demócratas, por lo que para avalar cualquier iniciativa requiere la aprobación de dos tercios de los legisladores. Se ve complicado, porque los republicanos son tradicionalmente renuentes a subir impuesto, menos ahora tras el recorte con el que se beneficiaron las corporaciones durante el gobierno de Donald Trump.
En los últimos meses, la administración de Biden ha buscado aprobar un impuesto del 15% a las corporaciones, similar al del G20, pero los republicanos se han negado a avalarlo.
Estados Unidos es sede del 28% de las 2,000 multinacionales más grandes del mundo. El acuerdo fiscal del G20 incluye también una revisión de cómo se gravan los impuestos a las multinacionales cuando obtienen ganancias en países donde no tienen presencia física.
Tras la aprobación formal del impuesto mínimo global en el G20, el presidente Joe Biden alabó la medida como un paso más en la búsqueda de un sistema tributario más justo y de impedir que las corporaciones se beneficien de los paraísos fiscales.
Here at the G20, leaders representing 80% of the world’s GDP – allies and competitors alike – made clear their support for a strong global minimum tax. This is more than just a tax deal – it’s diplomacy reshaping our global economy and delivering for our people.
— President Biden (@POTUS) October 30, 2021
“Estos es más que un simple acuerdo tributario”, escribió el presidente Biden en su cuenta de Twitter. “Es la diplomacia remodelando la economía global y aportando beneficios para nuestra gente”.
Sin embargo, el mandatario no ha tenido el suficiente apoyo en el Congreso para sus propias reformas impositivas. Luego de que su iniciativa de un impuesto mínimo global del 15% fue rechazado, el senador Ron Wyden, demócrata por Oregon, propuso un impuesto al patrimonio de los multimillonarios. Esta reforma impositiva se aplicaría únicamente a las personas con al menos $1 mil millones de dólares en activos o $100 millones de dólares en ingresos durante tres años consecutivos. A las pocas horas se desechó la idea que sólo afectaría a 700 contribuyentes con las características de ganancias mencionadas.
También te puede interesar:
• El aumento de impuestos de Biden a los ricos no es tan radical como parece, dicen analistas
• La reforma impositiva “contra los ricos” de Biden: no todos los demócratas se alinean a la propuesta de más impuestos a multimillonarios
• Plan social de Biden: los demócratas quieren pasar un proyecto sin impuestos a las fortunas heredadas de los ricos