El pago mensual por la compra de un auto en EE.UU. supera los $700 dólares en promedio, el récord más alto registrado hasta el momento
En el presupuesto analizado por Cox Automotive y Moody's Analytics, se contempla la financiación de un automóvil (nuevo o usado), así como los gastos de propiedad entre la gasolina y el seguro
Después de la compra de una casa, la adquisición de un automóvil es de los gastos más fuertes que pueden realizar las personas. Y en Estados Unidos, el sacrificio es aún más grande en la actualidad. Con la inflación, la escasez de materiales y de inventario, comprar un auto es cada vez más difícil. Se dio a conocer que el pago mensual supera los $700 dólares en promedio, siendo el récord más alto registrado hasta el momento.
El pago medio de un automóvil se situó en $712 dólares al mes este primer semestre del año, la cantidad promedio más alta registrada hasta el momento, según Cox Automotive con apoyo de Moody’s Analytics.
Los precios promedio de un coche nuevo han subido de manera considerable en el último año, al superar los $47,000 dólares, un incremento del 16.1% con respecto al 2021. Incluso los autos usados también han aumentado su valor, debido a la falta de inventario de nuevas unidades.
Durante la pandemia de Covid-19, se redujo el desarrollo de vehículos nuevos, en buena medida por la escasez de chips informáticos para el desempeño de los automóviles. Esto se convirtió en la principal razón para el aumento de precios que se vive actualmente en el sector.
No se confunda que el gasto mensual promedio sólo se simplifica al financiamiento de un automóvil nuevo o usado, en el presupuesto se contempla el fuerte pago de gastos vinculados con la propiedad del vehículo, como lo es el aumento en el precio de la gasolina, que ha superado los $5 dólares por galón, sumado con el precio del seguro del automóvil.
De acuerdo con una declaración de Ivan Drury, director senior de Edmunds, una empresa de compra de autos, a NPR, cada vez más personas se ven afectadas por el alto costo que significa tener un automóvil, luego de que 3 de cada 4 estadounidenses se desplazan en vehículo propio para realizar sus actividades cotidianas como ir al trabajo, a la escuela, al médico y a realizar sus compras.
“Por desgracia, para el segmento de la población que probablemente más lo necesita, cada vez está más lejos de su alcance”, añadió a Drury.
Y lo peor es que Drury pronostica que estos precios no se reducirán, debido a que “no parece que se vaya a resolver la crisis del chip”. Su consejo es acostumbrarse y tratar de reducir los costos de otras maneras, desde la comparación de productos más baratos en un seguro de automóvil hasta mejores hábitos de conducción para evitar un mayor gasto de combustible.
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