Cómo afrontar un despido a los 60 años, antes de la jubilación
Un despido a cualquier edad es un momento desagradable para cualquier trabajador, mucho más si tienes 60 años y estás cerca del retiro, pero hay cosas que puedes hacer para evitar que no te afecte tanto
Más de un tercio de las personas que aportan recursos para su jubilación se están quedando sin dinero para hacerle frente a sus gastos cotidianos. Crédito: Shutterstock
Nadie está exento de ser despedido, menos cuando las circunstancias económicas de un país plantean altas posibilidades de entrar en recesión. Por supuesto, hablamos de Estados Unidos. Ni los trabajadores más experimentados, los de mayor edad, se salvan de las terribles manos del desempleo, aun cuando se encuentren cerca del retiro. Por esa razón, queremos darte algunas recomendaciones para afrontar un despido a los 60 años, justo antes de llegar a tu jubilción. Y estos consejos aplican para cualquier persona de esa edad cercana, vivan o no una recesión.
Más del 50% de los trabajadores estadounidenses mayores de 50 años perdieron sus empleos debido a despidos, renuncias involuntarias o despidos forzados, según un estudio del Urban Institute. El estudio señala que existen serias implicaciones de ahorro para la jubilación, entre otros problemas de riesgo, cuando un trabajador de 50 o 60 años se ve obligado a dejar su trabajo.
No poder trabajar y ahorrar dinero para la jubilación durante sus últimos años de trabajo es significativo, porque probablemente represente el tiempo de ingresos más altos.
Debido a lo inesperado de la situacion (porque, claro, nadie planifica ser despedido), tienes que prepararte con anticipación, previendo cualquier posibilidad de ser corrido en tus últimos años laborales y cuando estés cerca del retiro. ¿Qué es lo peor que puede pasar? Que no te despidan y tu jubilacion sea mejor de lo que imaginaste.
1. Prepárate antes de un posible despido
Si tienes rumores de un posible despido, si has visto cada vez menos colaboradores en tu área de trabajo o intuyes que las noticias acerca de una recesión terminen por afecta tu empleo, debes prevenirte. Incluso debes prepararte de quedarte sin trabajo en todo momento, más allá de cualquier aspecto que te lo indique.
Los expertos recomiendan tener una cartera diversificada para asegurarse de que tus ahorros para la jubilacion no se tambaleen nunca ante un posible despido o uno ya concretado. También es conveniente tener cuentas de jubilación gravables con impuestos diferidos, es decir, que se te fiscalicen tus ahorros hasta su retiro. Esa opción te la dan las cuentas de jubilación individual (IRA) o los planes 401(k) tradicionales.
2. Solicita los beneficios de desempleo inmediato
Si te despiden, incluso cerca de tu retiro, debes pedir los beneficios de desempleo de tu estado de manera inmediata. También debes proponerte conseguir un empleo a tiempo parcial o por contrato para ser elegible.
3. Revisa cómo están tus finanzas
El fondo de emergencia es para momentos así, como cuando te quedas sin trabajo. Para ello, debes tenerlo. ¿No has creado uno? ¿Qué esperas? Si estás leyendo estas líneas es momento de hacerlo para prevenirte de un despido en cualquier momento de tu vida, y no necesariamente cuando estés cerca de tu retiro. Los especialistas recomiendan que esta herramienta tenga dinero suficiente para tres o seis meses de gastos esenciales.
Y hablando de gastos, revisa cuáles son tus necesidades, cuáles son las facturas importantes a pagar, como renta, servicios públicos, almentos y transporte para determinarr cuánto dinero por mes necesitas. También es importante que recortes gastos no esenciales, los denominados discrecionales, como salidas de entretenimiento, suscripciones, entre otros. Si los eliminas, mucho mejor.
4. Monitorea cuánto recibirás del Seguro Social
Aunque muchos expertos recomiendan postergar el mayor tiempo posible el reclamo de los beneficios del Seguro Social, tú tienes la última palabra, siempre y cuando ya hayas revisado cuánto recibirás si lo reclamas a los 62 años o hasta los 70 años.
Si tienes 60 años y no encuentras trabajo pronto, tal vez tengas que recurrir a los beneficios del Seguro Social a los 62 años.
Asimismo, debes priorizar tu salud. Si bien sólo te restarían dos años para cobrar el Seguro Social, para calificar a Medicare te faltarían cinco años (en el mismo ejemplo de los 60 años). En estas circunstancias, puedes revisar si te conviene adquirir 18 meses de atención médica a través de la cobertura COBRA, en el que te mantienes en el seguro médico de tu empleador, absorbiendo el total de los costos, o revisar el mercado de seguros por medio del Obamacare.
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