Cuáles son las señales de que aún te falta para poder jubilarte
La respuesta está en tus finanzas personales actuales y cómo se visualizan en el futuro
Si estás cerca de la jubilación, es bueno que eches un ojo a tus finanzas para saber si estás listo. Crédito: Filipe Almeida | Unsplash
Estás en los 50 años, se acerca cada vez más la jubilación, has hecho tu esfuerzo de ahorrar por 20 años o más y nunca parece ser suficiente. No hay una cifra exacta para decir que se tiene el retiro perfecto. Pero es posible detectar señales que, para esta edad o aún más grande, podrían indicar que no has ido por buen camino en tus finanzas y que es muy seguro que tendrías que esperar para jubilarte de mejor manera.
1. Tienes mucho dinero en tu cuenta corriente
Parecería una paradoja, pero no lo es y lo vamos a explicar.
Si ahora que estás trabajando, entre tus ingresos, tus gastos, facturas y estilo de vida cada mes terminas con mucho dinero, te felicitamos, pero tampoco es tan bueno. En otras palabras, quiere decir que no estás ahorrando lo suficiente para tu jubilación. Ese sobrante bien lo podrías añadir a alguna cuenta de jubilación para hacerlo crecer. En tu cuenta corriente jamás tendrás intereses a favor por dejarlo ahí.
De acuerdo con los expertos de Business Insider, ahorrar alrededor del 15% de los ingresos para la jubilación, incluida la aportación de cualquier empleador y configurar las transferencias automáticas es buena idea, el problema es cuando tus ganancias aumentan y dejas la misma cantidad siempre. Cuando tus ingresos incrementan, lo mejor es aportar más a tus cuentas de jubilación. Cada año procura revisar tus finanzas y realizar el ajuste necesario.
2. Planeas reducir tu estilo de vida
Si por el contrario al punto anterior, sufres por llegar a final de mes, es peor.
Cada vez que te acercas al retiro, es hasta natural comenzar a reducir el tamaño de tus cosas como la casa. Si ya no vives con tus hijos, ¿para qué querer una gran vivienda? Pero si la reducción se debe para cambiar ciertas costumbres como viajar, dar obsequios, salir a comer o disfrutar de un fin de semana romántico para llegar a fin de mes, entonces podría ser un problema para la jubilación.
Cuando llegas a los 50 años, podrías aumentar tus contribuciones para la jubilación para tratar de ponerte al corriente con tus necesidades para el retiro. Debes estar al pendiente de los límites de contribución para las cuentas 401(k) e IRA porque suelen cambiar con cada año que pasa.
1. Tomas con anticipación el Seguro Social
Si desde estos momentos contemplas la posibilidad de cobrar el beneficio del Seguro Social, algo está mal.
Los pagos del Seguro Social se calculan con base en tus 35 mejores años laborales de ingresos. Para la Administración del Seguro Social, la edad de jubilación es a los 65 años, pero puedes reclamar el beneficio a partir de los 62 años, aunque esto signifique que percibas una cantidad menor. El pago aumenta en su límite máximo hasta a los 70 años.
Esto no es una regla. En primera instancia, cobrar tu Seguro Social hasta el límite de edad parece una gran idea, pero esto depende de otras circunstancias. Hay veces que cobrarlo a los 62 años podría darte más dinero con el pasar del tiempo.
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