La deuda de los hogares en Estados Unidos crece a un ritmo más rápido que en 2007
La Reserva Federal de Nueva York dio a conocer que la deuda total general de los estadounidenses ha aumentado a un récord de $16.9 billones de dólares, pero tiene sus diferentes ramificaciones entre hipotecas, tarjetas de crédito y préstamos
La Reserva Federal (Fed) continúa en su campaña de elevar las tasas de interés para contener la inflación, que continúa muy por encima de las metas del 2% interanual del banco central. Para los consumidores, esto representa altas tasas de interés en préstamos y tarjetas de crédito. Como es evidente, ahora comprobado con un nuevo reporte, los hogares en Estados Unidos tienen una deuda que crece al ritmo más acelerado, incluso superior al acontecido en 2007.
A partir del cuarto trimestre de 2022, los saldos de deuda generales se encuentran en un récord de $16.9 billones de dólares, eso es un aumento intertrimestral del 2.36%, la tasa más alta desde el tercer trimestre de 2007, según el Banco de la Reserva Federal de Nueva York. Esto configura una deuda total de los hogares que ha aumentado $2.75 billones de dólares desde fines de 2019, impulsada por el aumento de los saldos hipotecarios y un aumento en la deuda renovable de las tarjetas de crédito este año, ya que la inflación compensa el crecimiento de los salarios.
“Aunque el desempleo históricamente bajo ha mantenido la base financiera de los consumidores generalmente sólida, los precios obstinadamente altos y las tasas de interés en aumento pueden estar poniendo a prueba la capacidad de algunos prestatarios para pagar sus deudas“, señaló el asesor de investigación económica de la Fed de Nueva York, Wilbert van der Klaauw, en un comunicado de prensa.
Tasas de interés más altas generan un proceso de endeudamiento más rápido, por lo que los consumidores estadounidenses enfrentan desafíos de pagos mensuales más altos. Esto se convierte en un círculo vicioso, porque hay menos dinero del presupuesto para cubrir las necesidades básicas y pagar la deuda al mismo tiempo. Sin contar que, debido a la inflación, los costos de productos y servicios están tan elevados que, a falta de dólares que alcancen, los hogares recurren a las tarjetas de crédito, adentrándose a un abismo de deuda sin fondo.
¿Qué otros datos de endeudamiento refleja el informe de la Fed de Nueva York?
Deudas de tarjetas de crédito
Los tiempos pandémicos que ayudaron a que muchos hogares utilizaran su cheque de estímulo para pagar la deuda de sus tarjetas de crédito quedaron en el pasado. Los saldos de tarjetas de crédito de EE.UU. se desplomaron de $927 mil millones de dólares en el cuarto trimestre de 2019 a $770 mil millones de dólares en el primer trimestre de 2021, una reducción del 17% en poco más de un año.
La alta inflación revirtió dramáticamente esos niveles en 2022. Durante los últimos dos años, los saldos de tarjetas de crédito renovables aumentaron un 28% a un récord de $986 mil millones de dólares, eliminando por completo cualquier avance pasado durante la pandemia y generando mayor cantidad de deuda.
Las tasas de interés anuales variables de las tarjetas de crédito se encuentran en un máximo histórico desde 1994 que se lleva registro. Hasta hace unas semanas, la Fed de Nueva York había reportado que la tasa de interés promedio de la tarjeta de crédito en Estados Unidos es del 23.4%. El último reporte indica que la tasa de interés promedio de las tarjetas de crédito aumentó del 14.6% en 2021 al 19.07% actual.
Deudas hipotecarias
Los saldos generales de la deuda hipotecaria alcanzaron casi $12 billones de dólares en el cuarto trimestre de 2022, un aumento de casi $2 billones de dólares con respecto al mismo trimestre de 2020, pero no es probable que sigan creciendo al ritmo vertiginoso observado en los últimos dos años.
Para los compradores que han tratado de solicitar una hipoteca en tiempos recientes, se enfrentan al doble de las tasas hipotecarias de lo que eran hace poco más de un año, alrededor del 6% al 7% en lugar de menos del 3%. Esto ha desacelerado el mercado inmobiliario que estuvo en auge durante 2020 y 2021, ya que, además, los compradores enfrentan precios promedio de viviendas elevados, que alcanzaron un máximo histórico de $413,800 dólares en junio de 2022, según la Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR).
Se espera que las tasas de interés de las hipotecas bajen durante 2023, aunque es muy poco probable que alguna vez bajen a los niveles inferiores al 3% observados durante la pandemia.
Deudas en préstamos para automóviles
Durante la pandemia y pospandemia, hubo problemas en la cadena de suministro que elevaron los costos de producción automotriz. Los precios de los autos usados aumentaron un 38% en 2021, según el índice de precios al consumidor, mientras que los precios de los autos nuevos aumentaron un 14% en ese tiempo, informó Kelley Blue Book. Aunque los precios de los autos usados han estado cayendo constantemente en los últimos meses, el precio de transacción promedio de los vehículos nuevos alcanzó un récord de $49,507 dólares en diciembre de 2022, un aumento de más de $8,000 dólares en solo dos años.
Ante este aumento de precios, los saldos de préstamos de automóviles siguieron el ritmo del mercado. La deuda pendiente de préstamos para automóviles se ha duplicado durante la última década, alcanzando un máximo histórico de $1.55 billones de dólares en el cuarto trimestre de 2022. Mientras tanto, las tasas de interés de los préstamos para automóviles nuevos a 60 meses han aumentado del 4.82% en 2021 al 6.55% actual, muestran los datos de la Fed.
Deudas en préstamos estudiantiles
La buena noticia en un mar de lágrimas de deuda, es que la tendencia de aumento de los saldos de deuda de los hogares está estancada, en buena medida gracias a la pausa de pago de préstamos estudiantiles federales que se mantiene desde marzo de 2020, y se tiene prevista que termine en junio de este año. Las tasas de interés de los préstamos estudiantiles federales se establecieron en 0% durante los últimos tres años. Muchos prestatarios han podido pagar el saldo principal de sus préstamos y reducir su deuda total.
El saldo actual de préstamos estudiantiles es de $1.6 billones de dólares. Si la Corte Suprema no permite que se ejecute la condonación de $10,000 y $20,000 dólares, propuesta por la administración de Biden para préstamos estudiantiles federales, y los millones de prestatarios no comienzan a reducir sus saldos pendientes, incluso liquidarlos aprovechando que no les genera intereses, la deuda en este rubro podría aumentar sin control después de junio.
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