Por qué para hacer buenas inversiones es mejor ser “razonable” que demasiado “racional”
Un especialista en economía hace un paralelismo entre los beneficios de una fiebre dolorosa con los miedos que genera una inversión.
Pareciera que las mejores decisiones que podría tomar cualquier inversionista es con base en las matemáticas, la tasa de rendimiento y la capacidad de crecimiento que podría tener tu dinero con ella. Uno pensaría que ser “racional”, haciendo cálculos y estimaciones, entendiendo los conceptos de inversión, sería lo mejor. Sin embargo, el análisis de un experto en finanzas podría convertirte más “razonable” que otra cosa.
Morgan Housel, analista económico y excolumnista para The Wall Street Journal, en su libro “La psicología del dinero”, sostiene que encontrar el éxito financiero es más una lección de psicología que de matemáticas.
De acuerdo con Housel, es mejor que los inversores sean bastante razonables que fríamente racionales, porque al final el comportamiento y las emociones terminan impulsando gran parte del éxito o la caída de un inversor.
En su libro, Housel compara las decisiones de inversión con las molestas fiebres médicas. Para demostrar su punto, se basó en el caso del psiquiatra Julius Wagner-Jauregg, quién ganó el Premio Nobel de Medicina en 1927 por su trabajo para tratar la neurosífilis.
En aquel momento, sólo 3 de cada 10 pacientes se curaban hasta que Wagner-Jauregg descubrió una forma poco ortodoxa para la época: inducir fiebre en los pacientes. Para lograrlo, el psiquiatra inyectó cepas leves de tifoidea, malaria y viruela en algunos pacientes para inducir fiebres altas y combatir la sífilis. Evidentemente fue un ensayo peligroso y muchos pacientes murieron, pero al final logró reducir la tasa de mortalidad, con la posibilidad de salvar a 6 de cada 10 pacientes.
Con base en esta experiencia, Housel cuestiona por qué se considera a la fiebre como algo malo y se trata lo más pronto posible, cuando puede ser fundamental en la lucha contra las enfermedades. Su respuesta: “la fiebre duele y la gente no quiere ser lastimada”.
“El objetivo de un médico no es solo curar la enfermedad. Es curar la enfermedad dentro de los límites de lo que es razonable y tolerable para el paciente. Puede ser racional querer tener fiebre si tienes una infección. Pero no es razonable“, explica.
Así es como aplica la misma lógica para el dinero: “No importa si has encontrado la estrategia de inversión matemáticamente óptima, si no te permite dormir por la noche, no te apegarás a ella”. Y continúa: “Lo que a menudo se pasa por alto en las finanzas es que algo puede ser técnicamente cierto pero contextualmente sin sentido”.
El mundo de las inversiones es impredecible, y es lo peor para muchas personas. Es racional meter tu dinero en alguna cuenta de inversión, cuenta de corretaje, comprar criptomonedas o acciones para hacer crecer tus finanzas, pero la volatilidad te podría parecer menos razonable.
Debes ser tolerante al riesgo. El mercado tiene muchos altibajos en su naturaleza, suben y bajan sin una mínima señal previa, por lo que debes saber sobrellevar y gestionar esa volatilidad para no tomar decisiones por impulso y puedas dormir bien en la noche.
Algunos expertos también sugieren dos cosas primordialmente:
1. Tener un colchón financiero. Si bien invertir en acciones te genera mejores rendimientos, tener bonos y una cuenta de ahorro de alto rendimiento, que no se compara con la inversión, puede brindarte estabilidad mental y financiera para los momentos de incertidumbre en tu inversión.
2. Invertir en lo que amas. Aunque muchos expertos sugieren ser desapegado en tus inversiones, con la opción de cortar el lazo de manera rápida; otros sugieren que por el contrario, inviertas en algo que más ames, así te será más difícil vender a la primera señal de problemas y mantenerte firme en una inversión que podría darte buenos dividendos después.
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