Qué hacer si renunciaste a tu trabajo y ahora quieres regresar: las 5 preguntas que tienes que responder antes

En los últimos meses, Estados Unidos ha padecido un fenómeno de fuertes abandonos laborales que los expertos han denominado como “La gran renuncia”. Hay trabajadores que han dejado su trabajo con plena confianza de encontrar uno mejor y otros que simplemente se han sumado a la ola, sin un plan definido. El arrepentimiento de renunciar se ha hecho presente en muchas de estas personas, pero antes de decidir regresar, es necesario que respondas por lo menos 5 preguntas que te ayudarán a definir si fue o no la mejor decisión para ti.

En 2021, hubo un récord de 47.4 millones de personas que renunciaron a sus trabajos durante la pandemia y la gran renuncia, según datos del Departamento del Trabajo. Y de acuerdo con una encuesta de ResumeBuilder.com a 1,250 trabajadores estadounidenses, alrededor del 23% de los empleados buscará nuevos trabajos este año.

Sin embargo, esos planes no siempre se logran y la frustración invade, haciendo que algunos de los trabajadores que renunciaron quieran regresar al empleo que dejaron. Pero antes de hacer cualquier movimiento, es importante que recuerdes en primer lugar por qué decidiste salirte de ahí y estas 5 preguntas te ayudarán a descifrarlo.

1. ¿Quemaste tu trabajo?

Hay trabajadores que guardaron frustración por muchos años, ya sea por sentir injusticias o malos tratos, que cuando vieron la oportunidad de salir, no lo hicieron de la mejor manera, es decir, quemaron su oportunidad en ese empleo. Debes hacer un acto de recapitulación y honestidad sobre si te fuiste en los mejores o peores términos. Pero si fuiste inteligente y saliste casi intacto de ahí, es posible que tengas oportunidad de regresar.

2. ¿Por qué renunciaste?

Hay una o varias razones por las que renunciaste y debes recordarlas. Por ejemplo, si no te llevabas con las personas en ese lugar, ¿realmente crees que algo va a cambiar si regresas? Por el contrario, si tu decisión tuvo que ver con asuntos como tu salario, sin tomar en cuenta todos los otros beneficios laborales que perdiste al irte, tal vez sea posible negociar tu reintegro.

3. ¿Tenías oportunidades de crecer?

Para muchos, la razón principal de renunciar era el salario; para otros, la falta de oportunidad de crecer profesionalmente. Hay empresas que por su tamaño y estructura es posible que no puedan brindarte el crecimiento laboral que deseas, por más que lo quieran intentar. Si esto es importante para ti y tu anterior trabajo no te lo puede brindar, quizás debes reconsiderar si quieres regresar ahí o no.

4. ¿Cómo te caía tu jefe?

Aquí debe haber dos perspectivas: las personales y las profesionales. Entre las razones personales, es posible que el trato con tu jefe no haya sido tan bueno, de hecho es muy común que muchos hayan renunciado por sus empleadores. En lo profesional, más allá del trato personal, es posible que tu jefe sea una persona influyente en el medio en el que te desarrollas. Quizás las habilidades que obtendrás en tu futuro laboral sea más valioso como para regresar.

5. ¿Es mala idea volver?

Si después de todo lo anterior te das cuenta de que te fuiste en malos términos, no tendrás el crecimiento financiero y profesional esperado y tu jefe no era el mejor, entonces elabora un plan alterno que no tenga que ver con regresar. Todas estas razones fueron tan válidas para irte como para no volver jamás.

También te puede interesar:

• Según datos de diciembre 2021, se vislumbra que hay menos renuncias a los trabajos en EE. UU.
• Cuáles son los 10 trabajos más buscados en Google en medio de la “gran renuncia” de Estados Unidos
• Cómo evitar unirte a la ola de “la gran renuncia” sólo por impulso: necesitas una estrategia para dejar tu trabajo