Qué estados podrían aumentar el salario mínimo de los trabajadores que reciben propinas en 2024
Una organización en Estados Unidos en pro de los derechos laborales estaría por enfrentar negociaciones que buscarían aumentar el salario mínimo de los trabajadores que reciben propinas en 2024
Ni con las propinas, muchos trabajadores que las reciben logran alcanzar el salario mínimo federal de $7.25 dólares por hora. Crédito: Shutterstock
En Estados Unidos, la mayoría de los trabajadores que reciben propinas tienen ingresos considerablemente más bajos. Aunque hay leyes que los protegen, pocas veces se presentan quejas sobre el tema. Para subsanar esta situación, hay gobiernos estatales que podrían aumentar el salario mínimo para este tipo de empleados en 2024.
Este año, al menos cinco estados podrían incrementar el salario mínimo para los trabajadores que reciben propinas en su jurisdicción.
Activistas han comenzado a gestionar este aumento en Michigan, Arizona, Ohio, Massachusetts y Connecticut, donde hay proyectos pendientes sobre este tema. Se busca eliminar un antiguo sistema de pago de dos niveles para los trabajadores por horas que ganan propinas, como camareros de restaurantes y cantineros, y que ganan un salario “inferior al mínimo” más bajo que los trabajadores que no reciben propinas.
Salario mínimo federal para los trabajadores que reciben propinas es de $2.13 dólares por hora. Por ley, los empleadores deben compensar la diferencia cuando las propinas no alcanzan el salario mínimo federal de $7.25 dólares por hora. La realidad es que pocas veces sucede y es difícil dar seguimiento a las autoridades por la falta de registro y pruebas, señalan defensores e investigadores laborales.
Solo siete estados pagan ya un salario mínimo único independientemente de las propinas. Poco más de la mitad de los estados del país han aumentado el salario submínimo para quienes ganan propinas por encima de los $2.13 dólares la hora, una tasa que aumentó por última vez en 1991. Aunque esos trabajadores todavía ganan un salario base menor que el salario mínimo aprobado en sus estados.
Un ejemplo de este desequilibrio se encuentra en Nueva York. En enero 1 entró en vigor el salario mínimo de $15 dólares por hora, excepto para quienes ganan propinas. Activistas y legisladores progresistas ya están presionando para poner fin a esa exención y piden a la gobernadora demócrata Kathy Hochul que respalde un salario mínimo único como parte de su plan presupuestario para 2024.
En batallas similares, donde los resultados han sido satisfactorios, se encuentra Chicago. En octubre, legisladores de la ciudad aprobaron eliminar gradualmente el salario submínimo con propina durante cinco años hasta que iguale el salario submínimo estándar por hora de la ciudad de $15.80 dólares. Casi un año antes, Washington, D.C., tuvo una medida electoral respaldada ampliamente por los votantes.
Saru Jayaraman, presidente de One Fair Wage, un grupo de defensa nacional que lideró el esfuerzo en Chicago, señala que estos triunfos han inspirado luchas similares en otras partes del país. Según la organización, miles de restaurantes en todo el país han abandonado voluntariamente los salarios inferiores al mínimo en favor del mismo salario base para todos las personas que trabajan atendiendo al público y en las cocinas, mientras mantienen las propinas.
One Fair Wage está haciendo campaña a favor de leyes que pongan fin al salario inferior al mínimo en Illinois, Maryland, Hawaii y Rhode Island en 2024. En total, el grupo dice que ha contabilizado 13 estados que están adoptando cambios de políticas similares a través de diversos medios este año.
Luego de que la economía reabrió tras la pandemia y los trabajadores regresaban a sus labores, la alta inflación provocó que las propinas fueran insuficientes. Si bien las propinas aumentaron, se han quedado muy por debajo de las necesidades de los trabajadores. CNBC encontró que algunos camareros ganan hasta un 30% menos de lo que ganaron en años anteriores.
Aunque el año está comenzando recién, One Fair Wage tiene medidas electorales en Michigan, Arizona y Ohio que podrían definirse durante 2024 y que serían determinantes para el incremento del salario mínimo para los trabajadores que reciben propinas en esos lugares (y, probablemente, en muchos otros estados de los Estados Unidos).
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